En el puesto número 11 del ranking ATP se encuentra Stefanos Tsitsipas. El tenista griego, que compite como profesional desde 2016, se ha quedado fuera de las diez primeras posiciones por primera vez desde 2019 después de firmar una irregular temporada. Ahora vuelve a ser noticia por su imprudencia al volante.
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Desde que llegó al circuito ATP, Stefanos Tsitsipas dejó claro que es un jugador y una persona diferente. Tanto es así que no duda en discutir con su padre en medio de un partido de un Masters 1000, echarle de la grada y prescindir de sus servicios como entrenador.
Ahora, tal y como está mostrando en sus redes sociales, Stefanos Tsitsipas está apurando el tiempo libre del que dispone antes de entrar de lleno en 2025. Y con una de sus últimas publicaciones en Instagram ha llegado la polémica.
A 276 km/h en un Aston Martin
El tenista griego subió un carrusel de imágenes y vídeos acompañados con el siguiente texto: “Los últimos meses han sido una silenciosa tormenta de evolución. A través de defectos, riesgos y posibilidades infinitas, la vida revela su belleza, no en la perfección, sino en su audaz impredecibilidad. ¿Qué viene? Solo el tiempo lo dirá”.
Aparte del profundo texto, llama la atención el vídeo que ocupa el octavo lugar en ese carrusel. En él, Stefanos Tsitsipas muestra una grabación en la que conduce un Aston Martin con el que alcanza los 276 km/h.
Nada se sabe del escenario por el que conduce, pero el cuadro de instrumentos revela un dato relevante: el sistema de reconocimiento de señales indica que el máximo de la vía serían 100 km/h.
Las críticas no tardaron en llegar: por grabarse mientras conducía y por no respetar los límites de velocidad. Queda por saber si, con las pruebas sobre la mesa (porque el vídeo sigue publicado en la cuenta de Instagram del tenista), las autoridades sancionarán a Stefanos Tsitsipas.
La sanción en España
En teoría, un exceso de velocidad de ese nivel podría tener como consecuencia una considerable multa, la suspensión del carnet o la confiscación del vehículo, dependiendo del país.
En el caso de España, estaría considerado como un delito, puesto que está superando en más de 80 km/h el límite de una vía interurbana. La sanción sería de prisión de tres a seis meses o multa de seis a 12 meses o trabajos para la comunidad de 31 a 90 días, además de privación del permiso de conducción entre uno y cuatro años.
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