El miedo de los fabricantes al futuro de los coches eléctricos

Los últimos análisis aseguran que el crecimiento de los vehículos sin emisiones está tocando su techo y que se prevé un enfriamiento en las ventas.

Coches eléctricos
Coches eléctricos recargando en una estación de carga. | Getty Images

Aunque siguen quedando usuarios que muestran desconfianza a la electrificación total del mercado automovilístico, lo cierto es que esta ha llegado para quedarse. Muchos países ya disponen de marcos regulatorios que les obligan a eliminar los motores de combustión de sus carreteras en un futuro cercano; por ejemplo, en Europa en 2035.

Además, las grandes inversiones que han realizado los fabricantes para implementar los vehículos eléctricos no son un capricho de las autoridades. Tal y como contó hace poco a EL MOTOR Wayne Griffiths, consejero delegado de Seat y Cupra: “Para hacer coches eléctricos rentables con una tecnología nueva se ha tenido que empezar desde arriba y continuar hacia abajo. Empezar por los coches caros para recuperar la inversión y en breve democratizar la electromovilidad”.

Quizás, lo más importante en este asunto es que las marcas de automóviles han dejado de destinar esfuerzos y dinero a los motores y plataformas de combustión. Muchas de sus plantas ya se han reconvertido en fábricas para coches eléctricos. Todas estas transformaciones no se van a revertir. La movilidad eléctrica es el futuro y, guste o no, ha venido para quedarse. Aunque esa moneda también tiene un reverso.

Desaceleración

Algunos analistas ya hablan de una ralentización del mercado del automóvil eléctrico. Según sus predicciones, en los próximos meses, se empezará a notar esta desaceleración en los pedidos. Las métricas les indican que los vehículos sin emisiones han alcanzado su apogeo. Las constantes subidas de los últimos años han tocado su máximo y a partir de ahora la curva se aplanará.

En estos momentos, la base de compradores no es capaz de sustentar un crecimiento exponencial como el de los últimos años. Los problemas de la transición hacia la electrificación total son de sobra conocidos: precio alto de los automóviles, falta de autonomía, escasez de puntos de carga y tiempo medio de recarga. 

En 2022, se vendieron por todo el mundo 10 millones de unidades. Para 2023 se espera terminar el año por encima de los 14 millones y medio de unidades y, de cara a 2025, las estimaciones apuntan a un crecimiento del 19%, alcanzando los 17,9 millones. Se trata unas previsiones de ventas insuficientes. Por eso, algunas marcas están revisando sus cifras a la baja.

Posición defensiva

Ciertos fabricantes están asumiendo que deben adoptar posiciones más defensivas respecto a las ventas de su catálogo de coches eléctricos, ya que el ritmo de crecimiento actual está tocando a su fin. Incluso el mercado que es el jardín del Edén para los modelos sin emisiones, Noruega, y en el que las matriculaciones de los coches de combustión son ínfimas (gasolina 1% y diésel el 2,5%), las ventas de eléctricos se mantienen por estar significativamente subvencionados.

Por su parte, Alemania ha sentido una caída de casi el 30% en la venta de los vehículos sin emisiones. En cuanto el Gobierno de Olaf Scholz (canciller federal de Alemania) ha cortado las subvenciones, el bajón ha sido considerable. En España, el Plan Moves III —las ayudas para comprar este tipo de motorizaciones— acaba a finales de diciembre, aunque se prevé un nuevo plan para los próximos años.

Las marcas y el futuro

Ante este panorama, muchos fabricantes han dado la voz de alarma. El más beligerante respecto a la transformación puramente eléctrica como único camino siempre ha sido Toyota. Su directivo Jack Hollis (vicepresidente ejecutivo de Ventas para América del Norte) aseguró hace unos meses que “no existe una base de clientes lo suficientemente grande para impulsar la demanda de coches eléctricos”.

Otros fabricantes como Volkswagen están sintiendo esta deceleración en los pedidos de vehículos eléctricos. Solo en Europa, el mercado más importante para la marca alemana, estos pedidos han descendido en un 50%, a pesar de que las entregas interanuales ascendieron en más de un 40%. 

Renault, por su parte, también vio rebajadas sus expectativas a la mitad en el número de unidades puestas en la carretera en el año 2022. En lo que va de año, los modelos 100% eléctricos de la firma francesa han alcanzado las 64.854 unidades. En Ford, explicaron que necesitaría otro año para cumplir con el objetivo de fin de año de alcanzar una tasa de producción anual de 600.000 vehículos eléctricos, que ahora espera alcanzar en 2024. 

También ha abandonado los planes de fabricar dos millones de vehículos eléctricos al año para finales de 2026. Mientras tanto, Tesla, que comenzó el año rebajando el Model 3 por debajo de los 40.000 euros, ha admitido que va a tener que seguir con estos descuentos continuados en el tiempo para evitar un estancamiento en los mercados.

Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, X o Instagram

Newsletter ElMotor

Recibe la newsletter de EL MOTOR con toda la actualidad del mundo del automóvil y la moto, tecnología, seguridad, conducción y eficiencia.

Apúntate

Servicios ELMOTOR

Encuentra los mejores talleres, seguros, autoescuelas, neumáticos…

BUSCAR
Cerrar

NEWSLETTER

Toda la actualidad del mundo del automóvil y la moto, tecnología, seguridad, conducción y eficiencia en tu buzón de correo.

¡Me interesa!
Por ahora no