La ofensiva eléctrica de Volkswagen está cada vez más cerca. La marca alemana ha anunciado varios modelos cero emisiones para su familia I.D., y el primero en llegar será el Volkswagen I.D., el hermano eléctrico del Golf, que llegará en 2019 y cuya versión de producción ya se ha dejado ver, aunque cargada de camuflaje.
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Se trata de un coche de dimensiones muy similares al superventas, con una longitud de 4.250 mm y una distancia entre ejes algo más larga que la de este. El diseño, aunque oculto, deja entrever unas formas más orgánicas y fluidas, con una suave línea que integra capó, techo y alerón trasero; debería prescindir de la parrilla convencional ya que no tiene motor térmico y las necesidades de refrigeración son menores, las llantas son semicarenadas para mejorar la aerodinámica y reducir el consumo de energía, y en la zaga se aprecia un portón de gran tamaño.
No será un modelo con una versión única, sino que se pondrá a la venta con varias variantes de distinta potencia y autonomía. Aunque todavía no se han confirmado los datos técnicos, los rumores apuntan a que el de acceso tendrá 150 CV y 300 Nm de par, mientras que el más potente podría llegar hasta los 200 CV. Cada uno irá asociado a distintas baterías, por lo que su autonomía será de algo más de 330 kilómetros para el pequeño y de unos 550 para el superior.
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El Volkswagen I.D. llegará con un sistema de recarga convencional de 11 kW, pero también será capaz de soportar cargas rápidas con hasta 125 kW con las que rellenará el 80% de su batería en unos 30 minutos. Del precio del tampoco hay datos concretos, pero la marca adelantó que será asequible y que costará una cantidad similar a la de un Golf diésel.
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