Detrás de un resultado desfavorable o negativo en la ITV puede haber diferentes causas y la carrocería de un vehículo también figura entre ellas. Su mal estado va más allá del apartado estético, puesto que pone en peligro la seguridad del propio coche y del resto de usuarios de la vía.
Aunque no lo parezca, la carrocería no es, únicamente, un elemento estético. Da forma al vehículo, pero también influye en aspectos tan relevantes como la seguridad, la aerodinámica o el consumo. Tal es su importancia que, según AECA-ITV, el acondicionamiento exterior, la carrocería y el chasis representan el 7% de los fallos totales.
En el apartado ‘Chasis y elementos acoplados al chasis’ de Real Decreto 920/2017, que regula las ITV, están incluidos los elementos de la carrocería que el técnico debe revisar. El mal estado de algunos de ellos puede significar un defecto leve con el que es posible superar con éxito la inspección, ya que no hay un número límite para este tipo de errores.
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Defectos graves en la ITV
Las cosas cambian cuando son graves. Entre los fallos de la carrocería que impiden pasar la ITV está la presencia de óxido o corrosión, que es motivo de suspenso porque influye en la seguridad del coche. Lo mismo sucede con las perforaciones.
Si la carrocería tiene aristas cortantes, el resultado de la ITV no será positivo. También será un defecto grave si hay algún panel que se puede desprender o si tanto las cerraduras como las bisagras están en mal estado.
Elementos de la carrocería que revisan en la ITV
Centrando el foco en los elementos de la carrocería que revisan en la inspección y que pueden acarrear un mal resultado, los técnicos comprobarán el estado de:
- Puertas y molduras: las primeras deben abrir y cerrar correctamente, mientras que las segundas tienen que estar sujetas y en buen estado.
- Paragolpes: no sólo deben estar correctamente fijados, también tienen que estar en buen estado. Un paragolpes con algún roce pasará la ITV, pero uno deformado o un coche sin él, no.
- Cristales: si el parabrisas delantero tiene alguna fisura (dentro o fuera del campo de visión del conductor), será marcado como un defecto.
- Limpiaparabrisas: tiene que funcionar adecuadamente. Los técnicos también verifican si el lavaparabrisas y las escobillas hacen lo propio y si su estado es bueno.
- Faros: en la ITV se examina si el plástico tiene alguna grieta, si su luminosidad está afectada por la opacidad del plástico o el tono de los plásticos naranjas de los intermitentes y el de los rojos de los faros traseros.
- Retrovisores: igual que ocurre con la luna delantera, el espejo de los retrovisores exteriores no puede tener fisuras. La carcasa también debe estar en buen estado.
¿Una carrocería con un golpe puede pasar la ITV?
La respuesta a esta pregunta se encuentra en el reglamento. En él se especifica que un golpe en la carrocería es razón de suspenso en la ITV. No obstante, en este aspecto entra en juego el juicio del técnico. Y es que no es lo mismo un impacto mínimo en el portón del maletero, que uno que impida abrir una puerta o haya dado lugar a un canto vivo.
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