Con el tiempo se acaban adquiriendo malas costumbres que afectan a la seguridad vial. Las prisas son malas consejeras y, por ganar unos segundos, algunos conductores se acaban saltando los ceda el paso o no respetan la prioridad en los cruces.
Las rotondas son, por excelencia, las intersecciones que más retos plantean a los conductores. La Dirección General de Tráfico y los agentes viales se cansan de repetir cómo se hace correctamente una rotonda, pero todavía hay gente que hace oídos sordos.
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Tráfico ha puesto el foco en explicar las prioridades de entrada y salida en una glorieta y en cuándo y cómo hay que poner los intermitentes. Ahora, la Guardia Civil ha lanzado el enésimo recordatorio dando importancia a quién debe ceder el paso a quién en los carriles de la rotonda.
Bajo la advertencia “no seas el listillo de la rotonda”, la Guardia Civil ha publicado en su perfil de X una infografía con varios coches en una glorieta. Da dos indicaciones. La primera es que la rotonda siempre se abandona por el carril de la derecha.
La segunda, que los coches que conduzan por los carriles interiores tienen que ceder el paso a los del carril derecho antes de abandonar la intersección. No vale poner el intermitente y cruzarse, esperando a que el otro vehículo frene y deje pasar.
Qué hacemos mal en las rotondas
Otros gestos que los conductores repiten erróneamente en las rotondas están relacionados con el uso de los intermitentes. Como han recordado la DGT y la Guardia Civil en varias ocasiones, estos solo deben usarse al salir de la glorieta o al cambiar de carril, no cuando se va a entrar a ella.
A la hora de circular, lo más aconsejable es hacerlo siempre por el carril exterior, el derecho. Los demás deberían usarse solo para adelantar, aunque en ciudad también se puede usar aquel que sea idóneo para el recorrido que se quiere realizar. Cruzarse desde el carril interior para abandonar la glorieta no está permitido.
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Graduada en Periodismo por la Universidad de Zaragoza, su primer contacto con el mundo del motor fue en los mundiales de MotoGP y Superbikes. Dio el salto al periodismo de motor hace cinco años y, desde entonces, sigue todo lo que tenga ruedas, especialmente si es made in Italy.