Un automóvil dispone de muchas unidades de medición, como por ejemplo la potencia en caballos (CV) o las revoluciones por minuto (rpm), que son fundamentales para entender el rendimiento. La potencia CV indica la cantidad de trabajo que el motor puede realizar, mientras que las rpm muestran la velocidad a la que opera.
Así, un número elevado de CV, generalmente, se traduce en una aceleración más rápida, especialmente a altas revoluciones, lo que resulta crucial, por ejemplo, en vehículos deportivos y de alto rendimiento.
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Otras mediciones, como el consumo de combustible, medido en litros por cada 100 kilómetros, reflejan la eficiencia del vehículo. Un valor más bajo indica un menor gasto de combustible y, por ende, mayor eficiencia.
Aunque una de las que más controversia genera y que los conductores menos entienden es el par motor. Esta unidad se mide en newton metros (Nm) y mide la fuerza de torsión del motor. Un par alto a bajas vueltas ofrece una mejor respuesta y aceleración, lo que es muy útil en conducción urbana o con vehículos pesados.
Definición del par motor
El par motor es un concepto fundamental en el mundo de la automoción. Es esencial para evaluar el rendimiento de un vehículo. Su definición, a grandes rasgos, se resume en que es la fuerza rotacional generada por el motor que permite al coche desplazarse. Es cierto que esta unidad de medida ha ido tomando relevancia con el tiempo. Hace 30 años solo era significativa en círculos de profesionales del motor. Actualmente, al par motor se le otorga tanta importancia como a los caballos (CV) o al consumo de combustible.
La influencia del peso en el par motor
El aumento en el peso de los automóviles modernos ha incrementado la importancia del par motor. Los vehículos actuales, que incluyen tecnología avanzada, lujos y sistemas de seguridad, pesan significativamente más que los modelos de décadas pasadas. Este incremento de peso es aún más notable en los coches eléctricos, que incluyen baterías pesadas. Debido a esta mayor masa, los vehículos modernos necesitan generar más par motor para moverse eficientemente, adaptándose así a las nuevas demandas de rendimiento.
Par y revoluciones del motor
El par se manifiesta en una velocidad específica del motor, medida en revoluciones por minuto (rpm). Por ejemplo, el Dacia Sandero de gasolina de 100 CV desarrolla su par motor máximo entre 1.300 y 1.800 rpm. Un dato es crucial para entender cómo responde un coche en diferentes situaciones de conducción. Los motores que generan su par máximo a bajas revoluciones ofrecen una respuesta más rápida en la conducción diaria, mientras que otros motores de alto rendimiento (modelos deportivos) requieren alcanzar altas rpm para desplegar su máximo par.
El par motor en el tamaño del vehículo
La importancia del par motor varía según el tamaño y el tipo de vehículo. Un coche urbano pequeño puede funcionar adecuadamente con un par motor relativamente bajo. Sin embargo, vehículos grandes como todoterrenos y furgonetas, especialmente cuando están cargados, necesitan un par motor mayor para trabajar de forma efectiva. Por esta razón, los motores diésel, que ofrecen un alto par a bajas revoluciones, son los más comunes en vehículos comerciales y camiones.
El par motor en coches eléctricos
Los vehículos eléctricos presentan una ventaja significativa en términos de par motor. A diferencia de los motores de combustión interna, los motores eléctricos proporcionan todo su par desde el momento en que se pisa el pedal del acelerador. Esto se traduce en una aceleración inmediata y potente, lo que ofrece un rendimiento más dinámico desde el inicio. Esta característica permite que los coches eléctricos destaquen en términos de aceleración y respuesta, superando a menudo a sus equivalentes de gasolina y diésel.
Medición del par motor
El par motor se mide en newton metros (Nm), reflejando la cantidad de fuerza necesaria para girar un objeto, ya sea apretar el tapón de una botella de gaseosa o una tuerca. Por ejemplo, al usar una llave dinamométrica de 0,5 metros de largo y aplicar una fuerza de 50 newtons, se obtiene un par de 25 Nm. Con las llaves, a la hora de apretar una tuerca o tornillo, es lo que se denomina par de apriete.
Referido al motor, mide cuánta fuerza de torsión está disponible en el cigüeñal a cualquier régimen de revoluciones del motor (rpm), afectando directamente la capacidad del motor para mover el vehículo. Por un lado se mide el largo del brazo del cigüeñal y por el otro la fuerza que se ejerce sobre esa palanca, gracias al movimiento (arriba y abajo) de los pistones y las bielas por las explosiones que se producen dentro de los cilindros. Ese es el famoso par motor.
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Entusiasta del motor en toda su magnitud, preferiblemente los V12. Le dijeron que cuatro ruedas eran mejor que dos, por eso se compró otra moto. Claro que también le apasiona cuando van las cuatro juntas. Ha trabajado como creativo publicitario para muchas marcas de coches y motos e hizo la mili en esto de juntar letras en la editorial Luike.