Por qué este verano gastaremos menos en autopistas

Las autopistas aportan rapidez y seguridad en los desplazamientos por carretera. El precio de los de peaje supone el principal escollo para que su uso por los automovilistas sea más frecuente, una circunstancia que mejora significativamente este año tras el rescate de varias de ellas por parte del Estado.

Es la conclusión a la que llega el estudio realizado por Automovilistas Europeos Asociados (AEA) con vista al inminente periodo vacacional de verano y en el que se estima que el descenso medio de las autopistas de peaje de España alcanza el 25,6%. Contribuye a ello la liberalización de las radiales de Madrid, R-2, R-3, R-4 y R-5; la M-12 del aeropuerto de Madrid-Barajas; la circunvalación de Alicante AP-7; el tramo de esta misma AP-7 entre Cartagena y Vera, además del abaratamiento de las tarifas en la AP-36 (Ocaña-La Roda) y AP-41 (Madrid-Toledo).

El ahorro más significativo corresponde a la R-4 (Madrid-Ocaña), cuyo precio en 2019 desciende nada menos que un 42,5% respecto al año anterior. También son destacables las rebajas de la R-2 (Madrid-Guadalajara), del 32,4%, y de la M-12 que comunica la capital con su aeropuerto, del 27,7%.

Desde AEA recuerdan, además, que los usuarios se pueden beneficiar de descuentos considerables utilizando en las autopistas rescatadas dispositivos electrónicos de pago (ViaT) e incluso circular gratis por ellas entre las 0:00 y las 6:00 horas.

Diferencias en las tarifas

En todo caso, la asociación de automovilistas denuncia que existen diferencias de precio de hasta el 660% entre 39 autopistas de peaje del territorio nacional, alguna con una longitud de 294 kilómetros, como la AP-68 entre Bilbao o Zaragoza, o apenas los cinco kilómetros de los túneles de Artxanda en las inmediaciones de Bilbao.

La autopista de peaje más cara de España es el túnel del Cadí (Girona), que tiene un coste de 0,40 euros por cada uno de los 29,7 kilómetros que la conforman. Este tipo de infraestructuras suelen ser las más gravosas para los automovilistas, como lo refrendan los 0,26 euros del túnel de Vallvidriera (Barcelona) o los 24 céntimos de euro de los mencionados túneles de Artxanda.

Por el contrario, el tramo de 28 kilómetros entre Puxeiros y Baiona (Pondevedra) tiene un precio unitario de sólo 0,06 euros, es decir, 6,6 veces menos que el más costoso del Cadí. Del mismo precio que la autopista gallega goza ahora la autopista entre Madrid y Ocaña, mientras que un céntimo más cuestan las de Bilbao-Santurtzi, A Coruña-Carballo, Sevilla-Cádiz, Ocaña-La Roda, Madrid-Guadalajara y Madrid-Toledo.

Otro aspecto destacable en el informe de AEA se refiere a la diferencia de precio en los peajes en función del momento en el que se utilicen los peajes. Es el caso de 11 de las 39 autopistas analizadas, que pueden variar sus tarifas en función de la hora, el día o el mes del año en que se recorran, encareciendo los tramos de mayor afluencia de usuarios.

La AP-71, en el tramo León-Astorga, cuesta tres veces menos en el horario nocturno entre 23:00 y 7:00 horas que durante el resto de la jornada. Y en los túneles de Artxanda el precio prácticamente se duplica durante los días laborables respecto a los fines de semana: de 1,20 euros a 0.72 euros.

En cuanto a los incrementos estacionales, las épocas más gravosas para los usuarios son precisamente las de mayor utilización, como las vacaciones de Semana Santa y los meses entre junio y septiembre. Como ejemplo, AEA señala que la AP-7 desde Alicante hasta Cartagena cuesta en estos periodos hasta un 79,5% mas que en el resto del año. Algo similar sucede en la AP-7 entre Málaga y Estepa, donde el recargo en temporada alta alcanza el 62,6% respecto a la tarifa habitual.

Las siguientes son las tarifas de todas las autopistas de peaje analizadas por AEA:

(1) Dependiendo del horario: hora punta, normal o valle / tarifa diurna o nocturna.

(2) Dependiendo del día: laborable, sábado, domingo o festivo.

(3) Dependiendo de la temporada: alta o baja.

(4) Dependiendo de la forma de pago: efectivo, tarjeta o telepeaje.