Corría 2016 cuando Bugatti lanzó el Chiron, heredero del Bugatti Veyron y siguiente hiperdeportivo de la dinastía de la marca. Sobre él se han desarrollado numerosas variantes e incluso modelos exclusivos (como el Centodieci o el 300mph+), pero su producción llega a su fin. Primero se despide de Europa, con un trío de ejemplares que toma su nombre de la primogénita de Ettore Bugatti, el Bugatti Chiron L’Ébé.
Nacida en 1903, fue testigo de la historia de Bugatti en primera fila e incluso Ettore puso sus iniciales (EB) en su nombre para que no perdiera su apellido incluso aunque se casara. L’Ébé tuvo una relación bastante cercana con su padre e incluso escribió su biografía, La historia de Bugatti.
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Bugatti Chiron L’Ébé: la biografía
“La biografía de L’Ébé Bugatti sobre su padre consiste en numerosas entradas del diario del propio Ettore, cartas de sus primeros empleados, clientes, socios comerciales y sus propias experiencias. Ayuda mucho a entender la personalidad de Ettore, sus objetivos y el aprecio que todos tenían por él y sus productos. Con este conocimiento podríamos transmitir el ADN Bugatti al presente manteniendo la esencia, grado de perfección y estándares de calidad hasta el día de hoy. A través de esta configuración única y el uso de su nombre para el Chiron y el Chiron Sport finales, queríamos honrarla con el estatus que merece en la historia de nuestra marca”.
El último Chiron
El resultado de este homenaje ha sido un trío formado por un Bugatti Chiron y por dos Bugatti Chiron Sport, cuyo diseño específico está inspirado por el amor que le tenía al Art Decó. No ha trascendido su precio.
La carrocería es de fibra de carbono expuesta, que está tintada en un tono de azul muy oscuro. Sobre ella, destacan los discretos acentos dorados presentes en las llantas, la parrilla delantera, la cubierta del motor, los logos exteriores y el alerón, en cuya parte inferior aparece la firma de L’Ébé.
El interior combina el azul más claro con un tono beis para dar forma a la tapicería de cuero. La fibra de carbono azul está presente en elementos como la consola central y presenta una distribución asimétrica en las puertas. Ambas lucen una imagen bordada con la evolución de los coches más importantes de la historia de la marca.
No hay cambios en su sistema de propulsión, que sigue siendo un bloque 8.0 W16 con cuatro turbos que entrega 1.500 CV.
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