¿Por qué la caja de cambios denominada CVT tiene tan mala fama entre muchos conductores?

La caja de cambios denominada CVT (del inglés continuously variable transmission) es un tipo de transmisión automática que, como sus siglas indican, es continuamente variable. Esto significa que, a diferencia de una caja automática convencional esta no tiene un número limitado de marchas. Por eso también se la denomina como caja automática de relaciones infinitas.

Y es que al no tener un número establecido de marchas, no limita la relación de desmultiplicación del motor.

¿Cómo funciona una caja de cambios CVT?

La más común es la accionada por correa, que une dos poleas, una conectada al motor y otra a las ruedas. Sin entrar en demasiados tecnicismos, un mecanismo en forma de cono es capaz de variar el diámetro de las poleas, lo que permite tener diferentes relaciones de transmisión.

Como el cambio de diámetro de una polea es gradual, se denomina variación continua. No hay salto entre cada marcha como en una caja de cambios tradicional. Pero, eso sí, algunos fabricantes incluyen en sus modelos un sistema que simula los cambios de marcha, como si fuera una caja automática con el clásico doble embrague o convertidor de par.

Beneficios de una caja de cambios CVT

El principal beneficio de este tipo de transmisión es la reducción de consumo, respecto a una caja manual y a algunas automáticas más tradicionales. Por eso se suelen utilizar en coches híbridos, para maximizar la cantidad de kilómetros que pueden rodar con un litro de gasolina.

Otra ventaja es su tremenda suavidad de funcionamiento, ya que al tener infinitas relaciones, el aumento de velocidad es totalmente lineal.

También su vida útil es más larga que una transmisión automática convencional, llegando su vida útil hasta los 300.000 kilómetros aproximadamente aunque, como siempre, todo dependerá del uso y mantenimiento que tenga.

Su coste de construcción también es más económico, ya que no requiere los distintos engranajes que sí necesitan otros tipos de transmisiones. Esto también genera menos problemas mecánicos con el tiempo y el uso. Eso sí, si sufre alguna avería, es bastante más costosa de reparar que en una caja automática tradicional.

¿Por qué tiene mala fama la caja de cambios CVT?

También hay varios motivos por los que esta caja de cambios no es del gusto de muchos usuarios.

Es una caja de cambios muy indicada para conducir en ciudad, donde no se requieren grandes aceleraciones ni hay, por lo general, grandes pendientes.

Porque en el caso de exigir lo máximo y al hundir el acelerador para demandar un rápido incremento de velocidad, sale a relucir cierta inferioridad respecto a otras cajas automáticas.

Y es que, para empezar, el ruido que se produce es bastante molesto, ya que el motor sube de revoluciones y no baja a no ser que se deje de pisar el acelerador. Este sonido parece indicar que el coche no tiene la potencia suficiente o que esta caja no sabe cómo sacarla y transformarla en una aceleración más eficaz. Todo fluye tan suave y tan ruidoso que puede llegar a ser desesperante.

Por esta suavidad y linealidad, la sensación que se tiene al demandar esta aceleración es que no se corresponde ni con la potencia que eroga el coche ni con la forma de pisar el pedal derecho.