El futuro de la automoción ya no pasa solo por los vehículos eléctricos o conectados: ahora también incluye robots.
Omoda y Jaecoo acaban de presentar en el Salón del Automóvil de Indonesia el AiMOGA Mornine, un asistente humanoide que ha demostrado habilidades únicas como reconocer personas, conversar en tiempo real y recomendar modelos de la marca en función de las necesidades del cliente.
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Incluso abre puertas
Este robot, equipado con percepción multimodal y modelos de lenguaje avanzados, puede planificar movimientos y ejecutar interacciones físicas de manera autónoma.
Su arquitectura le permite responder con naturalidad, reforzando la confianza en la relación con el cliente y apoyando a los equipos de ventas.
Una de sus funciones más llamativas es la de abrir puertas de automóviles de forma autónoma, algo nunca visto en un robot comercial hasta ahora.
No es un prototipo
La apuesta de ambas marcas chinas no se queda en un prototipo de salón. La compañía ha confirmado la producción y comercialización de 220 unidades del AiMOGA, lo que lo convierte en la primera experiencia real de integración de robots inteligentes en concesionarios de automóviles.
Su función será transformar la experiencia de compra, agilizando procesos y ofreciendo un servicio innovador en un entorno cada vez más competitivo.
Más allá de su espectacularidad, este robot humanoide se posiciona como una herramienta muy práctica para mejorar la experiencia en un concesionario y la venta de vehículos. Pero también podría poner en peligro miles de puestos de trabajo en los concesionarios.
Con esta iniciativa, la marca busca consolidarse como pionera en un nuevo paradigma de atención al cliente en la industria del motor.
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Periodista especializado en motor desde hace más de 20 años, ha trabajado en diferentes gabinetes de prensa (Federación Española de Automovilismo o Circuito del Jarama) y medios especializados (Motor 16, Marca Motor o Auto Bild). Apasionado de coches, motos y, ahora también, de los cacharros con alas.
