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El BMW 2002 Hommage Concept va de concurso de elegancia en concurso de elegancia: se presentó al mundo en el Villa d’Este y ahora ha aparecido con sus pinturas de guerra en el Pebble Beach.
Se trata básicamente del mismo modelo que se vio en mayo, un cruce entre un BMW M2 actual y un modelo mítico como el 2002 Turbo, pero la marca alemana ha querido apelar a su pasado en el mundo de la competición con una decoración especial.
“El BMW 2002 Hommage celebra el extraordinario avance que supuso esta tecnología [el turbo] para la deportividad” afirma Karim Habib, responsable de Diseño de BMW. “Con su icónica pintura negra y naranja, el coche tiene una apariencia que a los aficionados les recordara a las victorias en competición de la marca en la década de los 70.”
La combinación cromática a la que se refiere Habib es la de los colores de Jägermeister, aunque no se hace ninguna referencia directa a la marca de bebida espirituosa. En su lugar y con cierto toque cómico, se ha empleado la misma tipografía, se ha rehecho el logo del ciervo sustituyéndolo por un turbo y se ha renombrado como ‘Turbomeister’.
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