Cinco razones por las que el Mazda CX-80 es el coche perfecto para una empresa 

Más allá de la estética y la potencia, el nuevo Mazda CX-80 aterriza en el mercado con una propuesta única: cubrir las necesidades de los conductores más exigentes que buscan un vehículo atractivo, representativo, con garantías y servicios exclusivos.

En este escenario, el buque insignia de la marca japonesa pone bajo el foco a los conductores particulares y, también, a las empresas. Y es que hay cinco razones por las que el Mazda CX-80 es el coche idóneo para los profesionales.

1. Estilo y personalidad

Muchas veces, la primera impresión es la que cuenta y ahí el Mazda CX-80 destaca por ofrecer una imagen imponente creada para ser el centro de atención. Con ella, combinan a la perfección el diseño característico de la marca con la innovación.

El sello ‘Crafted in Japan’ se materializa en una estética minimalista donde se elimina todo lo innecesario para dar forma a un SUV elegante con líneas modernas y acabados de alta calidad, que evocan el lujo y la sofisticación.

No en vano, cada detalle del Mazda CX-80 está pensado para ofrecer una experiencia premium que va más allá de lo estético. El mercado corporativo sabrá apreciar sus tecnologías avanzadas de seguridad y confort, así como la experiencia de manejo llevada a un nuevo nivel. 

2. Eficiencia y prestigio

Las empresas tienen una serie de necesidades y para cubrirlas necesitan una flota de vehículos con un modelo que proyecte estatus y fiabilidad. El Mazda CX-80 es perfecto para este cometido por tres motivos.

Diseño: su elegancia permite a las compañías ofrecer a sus ejecutivos un vehículo que representa su imagen y valores, una verdadera extensión de la identidad corporativa.

Eficiencia en el consumo: el Mazda CX-80 es una alternativa eficiente gracias a sus motorizaciones respetuosas con el medio ambiente. La primera de ellas es una versión híbrida enchufable, con etiqueta Cero, una potencia conjunta de 327 CV y un consumo de 1,6 l/100 km. Su autonomía eléctrica llega a 61 kilómetros. La segunda propuesta mecánica consiste en un diésel (254 CV), que incorpora el sistema híbrido ligero M Hybrid Boost de 48 voltios con el que obtiene la etiqueta Eco de la DGT. En este caso, el consumo homologado se queda en 5,8 l/100 km.

Espacio y versatilidad: el Mazda CX-80 puede adaptarse tanto para traslados ejecutivos de lujo como para tareas de mayor capacidad gracias a la configuración personalizable de su interior, ya que en él pueden viajar hasta siete personas. Su amplitud lo convierte en una opción versátil y perfecta para quienes buscan que cada trayecto sea una extensión de su espacio laboral.

3. Un SUV para un mundo conectado

La vida moderna es una vida conectada y el Mazda CX-80 se adapta a esta necesidad y a las expectativas de confort y funcionalidad en la era digital. Para ello, está equipado con la última tecnología de infoentretenimiento y un sistema de infoentretenimiento que permite una conexión fluida y segura con dispositivos móviles.

Integración con smartphone: gracias a su compatibilidad con Apple CarPlay y Android Auto inalámbricos, los usuarios pueden acceder de manera intuitiva a las aplicaciones de su teléfono. Y para que no haya interrupciones, el Mazda CX-80 ofrece carga inalámbrica de tipo Qi.

Alexa: el Mazda CX-80 también está equipado con este asistente de voz, que permite a los conductores interactuar de forma segura con el vehículo mediante comandos de voz para realizar múltiples tareas, como controlar la música, obtener direcciones, acceder a noticias o gestionar otros dispositivos de domótica compatibles desde el confort del coche.

Servicios conectados de Mazda: con ellos, los propietarios pueden controlar múltiples funciones de su Mazda CX-80 de manera remota como, por ejemplo, el encendido o el control de climatización, la localización del vehículo, solicitar una revisión o asistencia en carretera, etcétera.

Actualizaciones OTA (‘Over-the-Air’): su capacidad para recibir actualizaciones de software en tiempo real consigue que el Mazda CX-80 esté siempre optimizado con las últimas mejoras de la marca. Así, el vehículo estará al día en seguridad, rendimiento y funcionalidades.

4. Inversión asegurada

El Mazda CX-80 es una opción altamente competitiva en términos de valor residual, sobre todo en sus versiones híbrida enchufable y diésel. Tras tres años de uso y con un kilometraje promedio de 15.000 kilómetros anuales, este SUV mantiene un valor de reventa que está entre los mejores del mercado.

Este aspecto es clave para las empresas porque permite planificar el retorno de inversión en su flota. De esa manera, aseguran un vehículo de calidad con un valor de reventa favorable que optimiza el ciclo de vida del activo.

5. Programa de Confianza Mazda

El Programa de Confianza Mazda es una iniciativa cuya misión se centra en aportar tranquilidad al conductor, especialmente ante la amplia variedad de tecnologías que ofrece la marca.

¿Cómo funciona? Si un cliente compra un Mazda CX-80 (o alguno de los modelos de la gama de tecnologías multisolución (como el Mazda CX-60 y el Mazda MX-30 R-EV) y considera que la elección de motorización no ha resultado ser la más adecuada, Mazda le permite cambiar de vehículo dentro del primer mes o antes de alcanzar los 1.000 kilómetros.

Esta flexibilidad es parte del compromiso con el que Mazda quiere asegurarse de que cada cliente esté satisfecho y puede elegir la tecnología que mejor se adapte a sus necesidades y estilo de vida.

Este programa refuerza la confianza en los vehículos de la marca y permite que los clientes exploren nuevas opciones sin riesgo. Así, pueden acceder a las ventajas de las tecnologías menos conocidas, pero altamente eficientes, que definen la gama de modelos de la marca.

En definitiva, el Mazda CX-80 se erige como una opción ideal para aquellos que buscan estilo, confiabilidad y un soporte de marca que garantice tranquilidad.

Con el respaldo del Programa de Confianza Mazda, uno de los valores residuales más competitivos, opciones de motorización que maximizan el rendimiento y la economía, y una conectividad avanzada que se adapta a las exigencias de la vida actual, junto con uno de los mayores espacios interior, este vehículo no sólo promete ser un éxito en el sector particular: también se perfila como una excelente alternativa para aquellas empresas que buscan un SUV que refleje profesionalidad y compromiso.