El robo más insólito sufrido por Ferrari

Ha sido la propia Ferrari la encargada de revelar que ha sido víctima de un robo de datos por parte de ciberdelincuentes que, tras el pirateo, también han solicitado un rescate.

Pero esta vez, y a pesar de la importancia de lo sustraído, la marca italiana ha declarado que no va a acceder a tal chantaje.

“Ferrari anuncia que ha sido contactada recientemente por un portavoz de hackers con una petición de rescate relacionada con ciertos datos de contacto de clientes. Tras recibir la petición de rescate, iniciamos inmediatamente una investigación en colaboración con una empresa líder mundial en ciberseguridad. Además, informamos a las autoridades pertinentes y confiamos en que investigarán con todo el peso de la ley”, señala la marca en una nota.

“Como política, Ferrari no accederá a la demanda de tal rescate, ya que el pago de tales demandas financia actividades delictivas y permite a los ciberdelincuentes perpetuar sus ataques”, añade el fabricante italiano.

Y continúa: “En su lugar, hemos creído que la mejor forma de actuar era informar a nuestros clientes y, por tanto, les hemos notificado la posible exposición de sus datos y la naturaleza del incidente”.

Los datos robados a Ferrari

“Ferrari se toma muy en serio la confidencialidad de sus clientes y comprende la importancia de este incidente. Hemos trabajado con expertos externos para reforzar aún más nuestros sistemas y confiamos en su resistencia. También podemos confirmar que la violación no ha tenido ningún impacto en las funciones operativas de nuestra empresa”, concluye Ferrari.

El fabricante italiano de coches deportivos de lujo ha revelado también que este robo de datos incluye nombres, direcciones, correos electrónicos y números de teléfono. Asimismo, Ferrari no cree que se hayan filtrado datos de pagos, números de cuentas bancarias u otras informaciones financieras.

El pasado mes de octubre, algunos medios de comunicación ya revelaron el robo de 7 GB de datos por parte del grupo de ransomware RansomEXX.

De momento, se desconoce la cifra solicitada por estos hackers. En todo caso, dada la negativa de Ferrari a pagar, es de esperar que estos datos salgan a la luz o que se utilicen de una forma más perjudicial para los afectados.