El Toyota GT86 homenajea a algunos de sus ancestros

Ay, la nostalgia. No hay que subestimar su poder. Evoca recuerdos, tiempos pasados, quizá mejores, quizá no, pero que forman parte de nuestra historia personal. Es algo de lo que tampoco se libran las marcas de coches, y de hecho en los últimos años han vivido bastante de ello.

Los anuncios de nuevos modelos inspirados en clásicos (el iDx de Nissan por ejemplo) o remakes de iconos (como el nuevo Ford GT) están a la orden del día, y Toyota se suma a la tendencia, aunque de una manera menos acusada.

En el GoodWood Festival of Speed que se celebrará el próximo 25 de junio la marca acudirá con un sexteto de Toyota GT86 bastante especiales, porque cada uno está decorado con las pinturas de guerra de un coche mítico de la historia de la marca.

Así encontramos uno inspirado en el Esso Ultron Toyota Supra, otro en el IMSA GTU Toyota Celica y otro en el Yatabe Speed Trial Toyota 2000GT. Sin embargo el que quizá sea más reconocible es el basado en el Castrol Toyota Celica GT-Four, con el blanco como base, los vinilos rojos y verdes y las llamativas llantas blancas.