Elon Musk es conocido por sus negocios y propiedades, como por ejemplo Twitter. También por ser dueño de Tesla, que todos los días ocupa titulares en la prensa mundial con sus revolucionarias ideas o los problemas de sus coches.
Pero también es un reconocido amante de los automóviles y poco se habla de su garaje, donde tiene algunos modelos muy curiosos. Y no, no son ni Tesla ni eléctricos, aunque probablemente tendrá (si no todos) gran parte del catálogo de modelos de su marca.
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El primer coche de Musk: un BMW 320i
Este BMW es de lo más especial para Musk, ya que fue su primer coche. Data del año 1978, pero el fundador de Tesla lo adquirió en 1994 de segunda mano y por unos 1.200 euros.
Mantuvo el coche varios años, hasta que un día permitió que uno de sus becarios de Zip2, la primera compañía que fundó dedicada al software, lo condujera: una de las ruedas se cayó.
Maye Muske, madre de Elon, publicaba en 2019 la fotografía de su hijo en su primer coche, con el texto: “1995 la gente dijo que no sabías nada de coches”.
Ford Model T
Un amigo le regaló este coche, un icono del mundo de la automoción. Vio la luz en octubre de 1908 y es considerado el automóvil más influyente del siglo XX.
Jaguar E-Type
Elon Musk ha dicho de él que le ha dado muchos problemas, pero todavía lo mantiene en su garaje. Su amor por él surgió a los 17 años, cuando le regalaron un libro de coches clásicos y, de entre toda la colección que se podía ver, este Jaguar fue el que más le gustó. Se prometió a sí mismo que algún día tendría uno.
Lotus Sprit Submarine
Otro coche exuberante que Elon Musk tiene en su garaje es este Lotus Sprit preparado especialmente para la película de James Bond La espía que me amó. Le costó casi un millón de euros.
Después de comprarlo, Elon Musk se llevó un buen chasco con él. Y es que lo probó en el agua y al salir intentó activar la salida de las ruedas, pero no asomaron por ningún lado. Fue un truco utilizado para la película.
McLaren F1
El imponente deportivo también esconde una excéntrica historia, casi tanto como la de su dueño. Y es que Elon Musk lo estrelló contra un muro al querer mostrarle a un amigo sus bondades (no se sabe si las del coche o sus dotes de pilotaje).
Lo compró tras vender PayPal, compañía que fundó años atrás. Pero el McLaren no estaba asegurado y ahí se acabó su historia. De los 106 McLaren F1 fabricados, el número 067 es el de Elon.
Audi Q7
Ideal para llevar a los cinco hijos de su primera mujer. Además, le sirvió de inspiración para crear el Tesla Model X y es que, según él, el acceso a la tercera fila de asientos en el Audi era muy angosto. Además, también puso puertas con apertura en alas de gaviota en el Model X para facilitar la entrada y salida en sitios estrechos.
BMW M5
Una de las berlinas más rápidas del mundo, pero que a Elon le pareció poco, por lo que adquirió una unidad preparada por Hamann y que aumentaba su potencia desde los 507 CV de la versión original hasta los 603 CV.
Porsche 911
Lo compró en 2012 y, por supuesto, no podía faltar en su garaje, al igual que lo hace en multitud de casas de famosos. Johnny Depp también tiene este modelo de Porsche.
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