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La Agencia Tributaria ha anunciado un nuevo plan de control para 2025 que pondrá especial atención en aquellos contribuyentes que muestren signos de riqueza no acordes a sus ingresos declarados. Entre estos signos, los coches de alta gama exhibidos en redes sociales jugarán un papel clave en la investigación.
Según el plan de la Agencia Tributaria, la posesión y exhibición de coches de lujo, especialmente aquellos de marcas como Lamborghini, Ferrari o Porsche, será un factor determinante para iniciar investigaciones. Los inspectores de Hacienda utilizarán las redes sociales como fuente de información para detectar posibles casos de fraude fiscal.
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La berlina de representación más rápida del mundo cumple 15 años: más de 350 km/h en un entorno lujoso y cómodo El objetivo principal de esta medida es detectar a aquellos contribuyentes que, a pesar de llevar un alto nivel de vida, declaran ingresos mínimos o inexistentes. La Agencia Tributaria sospecha que muchos de estos contribuyentes utilizan sociedades instrumentales para ocultar sus ingresos y desviar gastos personales.
Un control integral
Los inspectores de Hacienda cruzarán la información obtenida en redes sociales con los datos fiscales de los contribuyentes. Si detectan una discrepancia significativa entre el nivel de vida mostrado en las redes sociales y los ingresos declarados, pondrán en marcha una investigación.
Además de los coches de lujo, la Agencia Tributaria también pondrá el foco en otros signos externos de riqueza, como la posesión de viviendas de lujo, yates o aviones privados. También se investigará el uso de tarjetas de crédito con altos límites de gasto y la realización de viajes a destinos exclusivos.
La ostentación tiene un precio
Con esta nueva medida, la Agencia Tributaria envía un mensaje claro: la ostentación en redes sociales puede tener consecuencias fiscales. Aquellos contribuyentes que no puedan justificar su nivel de vida se enfrentarán a sanciones y regularizaciones. La Agencia Tributaria utilizará herramientas de inteligencia artificial y análisis de datos para detectar patrones y comportamientos sospechosos en las redes sociales.
El objetivo es identificar a los grandes defraudadores y garantizar que todos los contribuyentes cumplan con sus obligaciones fiscales. Este plan de control tributario se enmarca en la estrategia de la Agencia Tributaria de intensificar la lucha contra el fraude fiscal complejo. Además de la vigilancia de las redes sociales, se reforzarán los controles sobre neobancos, criptomonedas y alquileres turísticos.
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