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En 1951 vio la luz el Toyota BJ, el que puede considerarse primer modelo de lo que se ha convertido en todo un mito y que ahora llega con una nueva generación: el Toyota Land Cruiser.
Y lo hace a lo grande. Nunca mejor dicho, porque además de ser más grande (4,92 metros de longitud, lo que significa ocho centímetros más largo; 1,92 metros de altura, es decir, 7,5 centímetros más alto, y 1,98 metros de anchura, 9,5 centímetros más ancho) ha iniciado sus ventas por todo lo alto.
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Su versión denominada First Edition, limitada a 250 unidades para España, se han agotado en solo siete horas. En su precio, de 85.950 euros, va incluido un mayor equipamiento y ese halo de exclusividad de las ediciones limitadas.
Pero es que, además, cuenta con una imagen ligeramente diferente al resto, sobre todo por sus faros redondos y dos acabados exteriores bicolor con dos tonos exclusivos: Amarillo Tottori y Azul Oasis.
Las primeras entregas de esta serie especial serán a partir de septiembre, mientras que en octubre llegarán los pedidos del Toyota Land Cruiser VX, que tendrá un precio de 76.450 euros y un cupo limitado a 500 unidades.
Este acabado contará con ópticas Multi-Led, techo solar practicable, tapicería de cuero sintético y, a nivel tecnológico, bloqueo del diferencial trasero, descenso de pendientes (ahora aumentado de 4 a 30 km/h), control de avance lento o el Toyota Smart Connect con pantalla de 12,3 pulgadas y cámaras hasta por debajo del coche.
El acabado VXL llegará ya en 2025 y lo hará con una hibridación ligera de 48 voltios que le permitirá lucir la etiqueta ECO de la Dirección General de Tráfico en el parabrisas a pesar de contar con una mecánica turbodiésel.
Solo diésel
La única mecánica disponible para todos los Land Cruiser será una turbodiésel de cuatro cilindros, 2,8 litros de cilindrada, 204 CV y 500 Nm de par. No habrá transmisión manual y todos llevarán una caja automática de ocho velocidades.
Aunque el modelo también va a contar con reductora, Toyota asegura que la primera relación es más corta y será suficiente para superar la mayoría de obstáculos sin tener que recurrir a acortar más la relación del cambio. La octava marcha tiene una relación muy similar a la sexta de la anterior caja.
Esta motorización hace que el cupo de ventas en Europa solo sea de 11.000 unidades al año, para mantener la media de emisiones contaminantes de la marca en márgenes legales.
Con una capacidad de vadeo de 77 centímetros, el nuevo Toyota también contará con diferenciales central y trasero, reductora o barra estabilizadora delantera desconectable.
Está montado sobre la plataforma TNGA en su versión GA-F, por lo que mantiene la construcción con chasis de largueros y travesaños. Además, el resultante de este chasis más rígido y la nueva carrocería hace que el conjunto resulte ser un 30% más rígido.
También se han mejorado diversos elementos de la suspensión, así como la dirección, ahora con asistencia eléctrica.
En resumen, un todoterreno como antaño, dotado de una tecnología del siglo XXI y que promete satisfacer a todo aquel al que el asfalto se le quede pequeño.
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