El Porsche Taycan reina sobre el hielo al romper un récord mundial de ‘drifting’

Rompiendo moldes y desafiando las convenciones, el deportivo eléctrico ha llevado la conducción sobre hielo a un nuevo nivel.

Porsche Taycan hielo
El Porsche Taycan GTS derrapando sobre el hielo.

En un alarde de potencia y precisión, el Porsche Taycan ha sorprendido al mundo al realizar una proeza que parece desafiar las leyes de la física. El modelo deportivo eléctrico ha establecido un nuevo récord mundial Guinness por el derrape continuo más largo sobre hielo. Con 17 kilómetros recorridos en un circuito helado, ha demostrado que la electrificación no está reñida con el rendimiento y la emoción al volante.

La gesta se llevó a cabo en el gélido entorno de Laponia, donde las condiciones extremas pusieron a prueba al máximo las capacidades del Taycan GTS. Al volante, el experimentado instructor Jens Richter logró mantener el vehículo en un derrape controlado durante 46 minutos, completando 132 vueltas sobre una pista circular especialmente diseñada para el desafío.

Condiciones difíciles

El primer intento se vio truncado por las difíciles condiciones del hielo, que se deterioró rápidamente. Sin embargo, el equipo de Porsche no se rindió y, en una segunda tentativa, con neumáticos más adecuados y temperaturas más bajas, lograron el objetivo. Detrás de esta hazaña se esconde una combinación de tecnología punta y precisión milimétrica.

El Taycan GTS, gracias a su sistema de tracción total y el chasis excepcionalmente equilibrado, demostró ser un vehículo perfecto para este desafío. Además, el uso de neumáticos con clavos y un sistema GPS de alta precisión permitieron registrar cada detalle de la prueba. La combinación de todos estos factores, más el excepcional pilotaje de Jens Richter, permitieron lograr la ansiada marca.

Un nuevo hito para Porsche

Este nuevo récord Guinness se suma a la larga lista de logros del Taycan. En los últimos años, el deportivo eléctrico de Porsche ha demostrado su superioridad en diversas disciplinas, desde la aceleración en línea recta hasta la conducción en condiciones extremas. Los otros tres récords Guinness alcanzados son:

  • El derrape más largo con un vehículo eléctrico, dejando la marca en 42,171 kilómetros.
  • La velocidad más alta alcanzada por un vehículo en un edificio cerrado con 165,1 km/h.
  • El eléctrico que más alto ha subido, hasta los 5.355,134 metros sobre el nivel del mar.

Con este último hito, Porsche reafirma su compromiso con la innovación y el rendimiento, demostrando que la electrificación puede ofrecer una experiencia de conducción tan emocionante como la de los modelos de combustión.

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