Tesla llevaba mucho tiempo manteniendo conversaciones de alto nivel con funcionarios indios sobre sus planes de construir una fábrica en el país.
De hecho, y tras varias reuniones de altos mandatarios tanto de la marca americana como de la India, fue el propio Elon Musk, dueño de Tesla, el que se reunió personalmente con Narendra Modi, primer ministro indio.
Y es que la India tiene una población cercana a los 1.400 millones de personas, y aunque solo el 55% de los habitantes tiene coche propio, las ventas pueden ser de cientos de miles de unidades.
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Propuesta: una gran fábrica
En mayo, Tesla presentó una propuesta para establecer una gran fábrica en la India, 12 meses después de interrumpir sus planes de entrada en el mercado.
Tesla se reunió a principios de año con el ministro de Comercio indio, Piyush Goyal, para hablar de la concesión de terrenos para una fábrica por parte del Gobierno indio y de cómo establecer una cadena de suministro de vehículos eléctricos en el país.
Pero los costes y la situación del mercado eléctrico no resultaban interesantes para Tesla, de cara a construir una gigafactoría.
La marca automovilística americana esperaba poder vender sus vehículos eléctricos en la India de otra forma: importándolos de Estados Unidos y China, y pidió que se le eximiera de importantes aranceles locales. Los funcionarios indios se negaron a hacer tal excepción.
Tras esto y la reunión de Musk con Modi, Tesla ha paralizado la búsqueda de puntos de venta que, en principio, se iban a situar en las principales ciudades del país, como Nueva Delhi o Bangalore.
Los aranceles, motivo de la paralización
El problema principal por el que Tesla ha decidido paralizar su posible inversión es el elevado impuesto con el que la administración india grava a todos los vehículos eléctricos importados desde países extranjeros.
Estos aranceles pueden ser de hasta un 100% sobre el precio de los coches eléctricos que superen los 40.000 dólares (36.500 euros). Para los modelos de menor precio, este porcentaje se reduce hasta el 70%.
El fabricante de automóviles americano estaba interesado en producir su esperado vehículo eléctrico básico en la India. Lleva trabajando en este nuevo modelo desde 2020, y ha afirmado que llegaría al mercado con un precio de salida de unos 25.000 dólares (22.800 euros).
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