Carly, la herramienta que permite comprar con seguridad un coche de segunda mano

Durante los últimos años, el mercado de los coches nuevos ha ido incrementando sus tarifas de manera exponencial. Así, al tomar como referencia los últimos cinco años, desde antes de la pandemia de la covid, el precio de un modelo tipo del segmento de los compactos, con similar motorización y acabados, se ha incrementado en 4.500 euros de media.

Esto ha obligado a multitud de consumidores a volver la vista hacia el mercado de segunda mano. Esta es una de las razones por las que el parque automovilista español sigue incrementando la edad media de sus coches. Actualmente, se encuentra por encima de los 14 años de antigüedad.

En esta misma línea, los talleres de reparación de automóviles también han incrementado sus tarifas. Según los datos recogidos por la empresa de tecnología automovilística Carly, reparar la avería de un coche es un 20% más caro al compararlo con el año anterior.

Prevención de averías

Algo que puede ayudar a rebajar la factura de una visita al taller es conocer de antemano el problema técnico al que se enfrenta el vehículo. En algunas ocasiones, una reparación de miles de euros se puede evitar sustituyendo una pieza de unos pocos de euros.

La mayoría de los propietarios se encuentran en un estado de incertidumbre respecto a la salud de sus coches. A menudo, los problemas pueden detectarse a tiempo, pero la falta de acceso a información relevante da como resultado costosas reparaciones. Sin embargo, los fabricantes no proporcionan datos accesibles al conductor a menos que el vehículo sea llevado al taller, lo que supone diagnósticos costosos.

Cuando un automóvil tiene problemas, la mayoría de los propietarios, con pocos conocimientos mecánicos en general, no saben exactamente qué reparaciones necesitan. Esto puede culminar en arreglos innecesarios que aumentan la factura del taller.

Información completa

La empresa de tecnología automovilística Carly acaba de aterrizar en el mercado español con un escáner de diagnóstico que se complementa con una aplicación específica. Este conjunto está impulsado por algoritmos de programación avanzados con especialización en mecánica. Una manera de disponer de “mecánico digital profesional” en el móvil, como lo define la compañía alemana.

Hace unos años, uno de los fundadores de la firma comenzó a notar problemas en su coche, llevándolo al taller para que le diagnosticaran el problema. Tras presentarle el presupuesto de las reparaciones de casi 8.000 euros (una suma que superaba el valor del coche), empezó a idear una solución más sencilla. Así nació Carly.

Conocer el estado del coche

Así, tras desarrollar este aparato que permite acceder a los datos de error del coche, el fundador de Carly descubrió que el problema se reducía simplemente a sustituir una pieza de 80 euros.

Carly se compone de un pequeño escáner (poco más grande que un mechero) que se conecta al puerto OBD2 del coche, situado generalmente cerca del volante o sobre los pedales, debajo del salpicadero en el lado del conductor.

A través de una conexión bluetooth, el escáner se conecta a la aplicación móvil donde se presenta toda la información del coche. Este dispositivo es válido tanto para los conductores con escasos conocimientos mecánicos como para los profesionales del sector.

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¿Cuánto cuesta?

El escáner OBD2 tiene un precio de 64,80 euros y se complementa con la aplicación móvil que funciona con una licencia anual. Los precios de esta licencia varían según la marca del coche. Sin embargo, se deben asumir unos costes de al menos 20 euros al año.

Dicha licencia está vinculada a una marca de vehículo y un modelo concretos y sólo se activan las funciones disponibles para ese caso.

Así mismo, la última función de la app de Carly que está disponible para Android y IOS, el Mecánico Inteligente, también tiene otro coste de 35,99 euros.