El nuevo Lexus RX llega con una doble personalidad

La quinta generación del SUV japonés cuenta con tres versiones y una de ellas muy orientada a la deportividad.

Lexus RX
Dos de las unidades de pruebas que estuvieron disponibles en la presentación del nuevo Lexus RX en Madrid. | Lexus

Fue en el mes de septiembre del pasado año cuando Lexus presentó el nuevo RX. Entonces ya se pudieron conocer todos los detalles del SUV de mayores dimensiones (4,89 metros de longitud) de la marca japonesa, la quinta generación de un coche del que se han vendido 3,5 millones de unidades en el mundo, 300.000 en Europa y 12.000 en España.

La definición de nueva generación es fiel a la realidad, ya que el 95% de sus piezas son diferentes a las del modelo existente hasta el momento. Ahora el redefinido RX está a punto para comenzar a rodar por las carreteras españolas, puesto que se han realizado 200 reservas (del total de 500 matriculaciones que Lexus espera vender durante 2023) y se comenzarán a entregar durante el próximo mes de febrero.

Además, su disponibilidad ya ha permitido realizar una breve toma del contacto con el modelo, con algunas unidades homologadas para el mercado estadounidense y alemán, que, por lo tanto, presentaban algunas diferencias de configuración respecto a las nacionales. Pese a ello, la esencia del coche es la misma y permite recoger unas primeras sensaciones a su volante.

Tres son las versiones mecánicas del RX, que se combinan con cuatro niveles de equipamiento: Business, Executive, Luxury y F Sport. El motor básico, y que será el menos vendido, es el híbrido autorrecargable 350h, con una potencia de 250 CV; a continuación, se posiciona la propuesta más equilibrada y, en consecuencia, que debería tener más aceptación como es el 450h+: un híbrido enchufable de 309 CV y 65 kilómetros de alcance 100% eléctrico homologado; y por último, el miembro más deportivo de la familiar, un 500h que llega hasta los 371 CV.

Refinamiento japonés

La mayoría de las unidades de pruebas correspondían a los niveles de equipamiento superiores, aunque en todos los casos es palpable que Lexus se mantiene fiel a los principios de calidad, refinamiento y equipamiento propios de una marca de orientación premium.

El estilo es muy japonés, sin alardes innecesarios, pero todo donde debe de estar con una dotación completísima, conectividad de última generación (aunque la conexión con el teléfono inteligente se bloqueó un par de ocasiones, probablemente al tratarse de coches de preserie) y la posibilidad de que el cliente más comprometido con la sostenibilidad opte por materiales de origen vegano en las tapicerías o con el uso del bambú para los guarnecidos.

También común a cualquier variante, salvo matices, es un diseño que se mantiene imponente. La marca lo define como “carrocería de doble punta de flecha” en referencia a un poderoso frontal en el que la parrilla reclama el protagonismo principal. En el lateral se mantiene el dinamismo de formas y destacan las generosas llantas de 21 pulgadas, manteniéndose el efecto de techo flotante para el pilar posterior oculto.

El poderoso frontal del nuevo RX.

En la zaga, se encuentra una tira luminosa en todo el ancho del coche (que ha ganado en esta dimensión) además del nombre de la marca escrito en letras plateadas, en sustitución del habitual logo de Lexus.

Dos propuestas diferenciadas

Las carreteras del noroeste de la Comunidad de Madrid fueron el escenario para descubrir brevemente la personalidad del nuevo Lexus RX. En concreto con las dos versiones que deben acaparar las ventas, principalmente la 450h+. Esta opción intermedia se antoja como la más equilibrada y razonable de la gama (desde 88.500 euros), la que exhibe con mayor fidelidad en espíritu de la marca.

Se trata de un SUV refinado en marcha, silencioso y confortable, con potencia suficiente para disfrutar de unas prestaciones al nivel de lo esperado y con todas las ventajas del etiquetado Cero de la DGT. Los 65 kilómetros sin emisiones que declara la marca parecen difíciles de alcanzar, aunque no hubo oportunidad de realizar mediciones de consumo eléctrico o de gasolina.

Lo menos convincente, como suele ocurrir en la gran parte de los modelos que lo utilizan, su cambio automático CVT: los vacíos de rendimiento y la rumorosidad no están en absoluto a la altura del resto de un conjunto que roza la exquisitez.

En la ciudad muy probablemente se llegue a esa distancia teórica, pero en carretera mover un conjunto que no es precisamente ligero pasará factura al gasto. Aunque siempre, por supuesto, con valores mucho más convincentes que los previsibles en un motor de combustión pura.

Mayor deportividad

En una marca de alta gama siempre hay quien quiere algo más. En este caso, son aquellos dispuestos a renunciar a una mayor eficiencia para disfrutar de sensaciones más intensas durante la conducción.

Para ellos se ha creado el 500h, que sigue siendo un coche híbrido convencional pero combinado con un poderoso motor de 2,4 litros, turboalimentado y con un cambio automático por convertidor de par de seis velocidades que deja bastante en evidencia al CVT de sus hermanos.

El interior del SUV familiar.

Se trata del primer híbrido con turbo desarrollado por Lexus, una tecnología compleja de sintonizar pero el resultado es bastante satisfactorio (aunque sería necesario un mayor conocimiento del producto para apuntalar esta percepción. Un propulsor de gasolina y dos eléctricos, uno en cada eje, que ofrecen un sonido muy diferente al de los otros RX y, claro está, unas respuestas mucho más contundentes.

El 500h empuja con energía, el cambio automático ayuda a que las aceleraciones se revelen brillantes (poco más de seis segundos para llegar a 100 km/h desde parado), mientras que el consumo de combustible se mantiene en rangos aceptables para un SUV de su estilo gracias al apoyo eléctrico: con pocos kilómetros para su verificación, la media a buen ritmo rondó los 9 litros a los 100 kilómetros.

Esta variante se beneficia, además, de las ventajas teóricas del sistema Un sistema inteligente de reparto de par entre cada una de las ruedas, que alterna de forma automática y constante la tracción para conseguir la mayor eficacia y estabilidad en cualquier tipo de trazado. Tampoco hubo oportunidad de comprobar tales bondades, por el tipo de trazado y por el montaje en los RX de neumáticos todotiempo que distaban mucho de ser los ideales para una exigencia elevada.

Claramente se trata de una versión que satisfará a aquellos que aprecian todas las cualidades que hacen de Lexus una marca diferencial, pero que tampoco quieren renunciar a la deportividad que ofrecen algunos competidores de segmento incluso en los SUV, como puede ser el caso de BMW.

Eso sí, para disfrutar de todo ello hay que desembolsar 111.300 euros, el precio más elevado de una oferta comercial de una gama que arranca en 81.300 euros.

Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, X o Instagram

Newsletter ElMotor

Recibe la newsletter de EL MOTOR con toda la actualidad del mundo del automóvil y la moto, tecnología, seguridad, conducción y eficiencia.

Apúntate

Servicios ELMOTOR

Encuentra los mejores talleres, seguros, autoescuelas, neumáticos…

BUSCAR
Cerrar

NEWSLETTER

Toda la actualidad del mundo del automóvil y la moto, tecnología, seguridad, conducción y eficiencia en tu buzón de correo.

¡Me interesa!
Por ahora no