Es uno de los familiares compactos deportivos con mayor poderío del mercado. El nuevo Audi RS 3 mantiene la misma potencia del actual, 400 CV, pero gana par o fuerza de empuje y acelera todavía más rápido: de 0 a 100 m/h en solo 3,8 segundos, tres décimas menos.
Sin embargo, y como sucede en casi todos los Audi RS, su potencial no resulta incompatible con el uso diario, porque puede tener consumos razonables y ofrece el suficiente espacio y confort como para cumplir como coche único para todo.
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El nuevo modelo RS 3 de Audi ya está disponible desde 77.500 euros con carrocería Sportback o de cinco puertas y a partir de 78.600 con la Sedán o berlina. Esta última es más grande (mide 4,54 metros de longitud por 4,38 de la otra) y tiene más maletero (321 litros en lugar de 282).
Las primeras unidades se entregarán en otoño, tanto de un formato como del otro.
Sus precios son muy similares a los del Mercedes Clase A AMG 45 S, que es su competidor más directo y, junto con el Audi, el único compacto que llega a la frontera de los 400 CV (el Mercedes tiene 421 CV).
La imagen gana músculo, gracias a los ensanchamientos de la carrocería y los detalles específicos de esta versión RS, como la parrilla oscurecida, las grandes llantas y la doble salida de escape ovalada. Y el interior también se adereza, presentando un volante diferente (forrado en piel vuelta), asientos anatómicos y una instrumentación digital con menús propios.
El motor 2.5 TFSI de cinco cilindros y 400 CV gana par, hasta los 500 Nm (30 más que antes), favoreciendo la aceleración y la respuesta a bajas vueltas, mientras que la potencia se mantiene constante de 5.600 a 7.000 revoluciones, reforzando el empuje a altas revoluciones.
El cambio automático sigue siendo el DSG de doble embrague y siete marchas, pero la tracción 4×4 resulta más avanzada y puede repartir la potencia entre las ruedas traseras para imprimir mayor agilidad a la conducción. También permite activar un modo drift o de derrapaje controlado.
Las prestaciones son estratosféricas, con el citado 0 a 100 km/h en solo 3,8 segundos y una velocidad autolimitada a 250 Km/h. Sin embargo, hay un paquete opcional RS Dynamic que eleva la punta a 280 km/h y, si además se montan los frenos cerámicos, sube otro escalón hasta 290 km/h y se convierte en el familiar compacto con mayor velocidad. Su rival el Mercedes se queda en 270 km/h.
El consumo medio oficial arranca en nueve litros cada 100 kilómetros, un registro muy meritorio para el poderío mecánico del modelo.
Además, ahora se pueden configurar los faros delanteros y elegir al gusto entre varios diseños lumínicos, que pueden mostrar una bandera de carreras o los caracteres R, S o 3 que dan nombre al modelo.
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