Chery, la marca china que quiere sustituir a Nissan en Barcelona

Desde que Nissan anunció su retirada de Barcelona, han sido mucho los rumores sobre qué podría pasar con su fábrica en la Zona Franca. El último es que podría ser Chery, la gigantesca compañía china, la que se haga con el control de la planta, que tendría una producción anual de enorme volumen.

El pasado lunes, Tongyue Yin, presidente de la empresa, se reunió con la patronal catalana Foment del Treball y con el conseller de Empresa, Roger Torrent, para establecer un diálogo que permita el movimiento. Además, hoy mismo está previsto que se reúna con el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès.

Una fábrica en la Zona Franca

El interés de la compañía asiática tiene todo el sentido del mundo, porque, como ocurre con otras marcas de coches chinos, ya ha anunciado su intención de vender coches en Europa. Contar con una planta en el Viejo Continente supondría un plus a sus planes, recortando gastos de transporte y acortando tiempos de entrega.

Además, instalar la fábrica en un lugar como la Zona Franca, con un gran número de trabajadores cualificados, evitaría una inversión inicial en la formación de los empleados.

Lógicamente, el impacto que tendría en la economía catalana y española sería muy positivo. Se estima que la producción anual en la planta de Chery sería de unos 300.000 coches al año y supondría la creación de unos 1.500 puestos de trabajo.

Los coches de Chery

Aunque el fabricante chino tiene coches de todo tipo en su país de origen, su plan de expansión en Europa está claro y quiere atacar el mercado mediante los coches eléctricos.

En esta área, su tecnología puede competir de tú a tú con las marcas europeas, algo que no es tan factible con mecánicas de combustión. Los motores térmicos de Chery, como ocurre con otras marcas asiáticas, salen perdiendo en cuanto a emisiones o prestaciones.

Omoda 5, un SUV eléctrico

El primer modelo en llegar, que ya está a la venta en Italia y más tarde desembarcará en España, sería el Chery Omoda 5. Es un SUV de estilo ligeramente cupé que se comercializaría exclusivamente en su variante de cero emisiones.

Esta monta un único motor eléctrico de 150 kW de potencia (204 CV), alimentado por una batería con 64 kWh de capacidad.

Acelera de 0 a 100 km/h en 7,8 segundos y homologa una autonomía de 450 kilómetros. Con recarga rápida (de potencia no especificada), puede recuperar del 10 al 80% de su batería en solo 35 minutos.