El nuevo Skoda Kodiaq ofrece hasta 100 kilómetros en modo eléctrico

Muchas marcas se estrenaron en el terreno de los SUV con modelos pequeños, pero Skoda lo hizo al revés: debutó con su coche de mayor tamaño, el Kodiaq. Por eso, precisamente, es el primer todocamino de la firma en estrenar su segunda generación.

La firma checa, consciente del éxito de su SUV de cinco o siete plazas, que ha vendido casi 800.000 unidades en 60 mercados, ha optado por evolucionar la fórmula, manteniendo lo que funcionaba y mejorando las áreas en las que había margen de optimización.

Respecto a lo primero, era un coche grande y espacioso, y ahora lo es más. Mide 4,75 metros de largo, lo que supone un aumento de seis centímetros respecto a su predecesor. Su maletero es realmente grande: 920 litros con la configuración de cinco plazas (+75 litros) y 340 litros en la de siete; supera los 2.000 si se abaten todos los asientos. Además, las plazas de la tercera fila han mejorado el espacio para las cabezas de los ocupantes.

En términos de diseño, Skoda no es de gustos estridentes, presentando estampas solventes y sobrias. Eso no cambia en el nuevo Kodiaq, pero sí que tiene un aire más moderno gracias al formato dividido de los grupos ópticos delanteros, a las entradas de aire del paragolpes y a los pilotos traseros en forma de C que se unen por su extremo inferior.

El habitáculo, espacio aparte, luce un puesto de conducción bastante despejado, que reduce los controles analógicos a tres ruletas en la consola central, bajo las que se sitúan dos tomas USB y hueco para un cajón refrigerado para carga inalámbrica simultánea de hasta dos móviles.

Por encima, preside una pantalla táctil flotante de 12,9 pulgadas, a cuyo lado se encuentra un cuadro de instrumentos digital de 10,25 pulgadas.

Llega la versión híbrida enchufable

En el terreno mecánico, lo más destacado es la incorporación de una versión híbrida enchufable que le permitirá lucir la etiqueta Cero de la Dirección General de Tráfico. Combina el motor de gasolina 1.5 con un bloque eléctrico para desarrollar 204 CV de potencia. El sistema se completa con una batería de 25,7 kWh, lo que le otorga 100 kilómetros de autonomía eléctrica. Además, es compatible con cargas rápidas de hasta 50 kW.

También debutan en el Kodiaq las versiones de etiqueta ECO que, como en el caso del todavía por desvelar nuevo Superb, se limitan a una única motorización microhíbrida 1.5 TSI de 150 CV.

La gama la completan motores térmicos convencionales, concretamente un gasolina 2.0 TSI de 204 CV y dos diésel 2.0 TDI de 150 CV y 190 CV, respectivamente; el segundo, con tracción integral. Todas las mecánicas se asocian a una caja de cambios automática DSG, bien de seis relaciones, bien de siete.

Se espera que las ventas del Skoda Kodiaq comiencen a principios de 2024, pero las entregas no llegarán hasta mediados de año.