Los SUV siguen siendo los modelos más codiciados por los compradores. Las marcas, sabedoras de ello, no paran de desarrollar este tipo de carrocerías para ofrecer lo mejor de dos mundos: la amplitud y el confort de las berlinas unido a un puesto de conducción más alto —similar al de los todoterreno—, que otorga un plus de seguridad al conductor.
La segunda generación del Kodiaq lleva esta filosofía impregnada en sus genes, aunque hay mucho más. Desde su estreno en 2016, el modelo dejó bien claro que era una de las grandes apuestas de Skoda para elevar su cuota de mercado. Así, la compañía ha despachado ya 866.100 unidades en los 60 países donde se comercializa.
El Kodiaq de la primera generación fue desarrollado sobre la plataforma MQB del grupo Volkswagen, compartida con los Volkswagen Tiguan, Audi Q3, Seat Ateca, Seat Tarraco e incluso con el Skoda Karoq. Esta nueva generación puede competir de tú a tú con todos ellos, ya que es un vehículo más grande y espacioso, y, además, ofrece un mayor equipamiento. Aunque su valor diferencial es la introducción de una versión híbrida enchufable.
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Más aerodinámico
Al observar estacionado el nuevo Skoda Kodiaq, lo primero que llama la atención es su silueta. Aunque conocida, ahora está más afilada. Sus nuevas firmas lumínicas en ambos ejes y la cintura más marcada ayudan a generar una imagen más robusta y escultural.
Además, ha crecido en tamaño respecto a su predecesor. Ahora mide 4,758 metros de longitud (61 milímetros más) gracias a unos voladizos más grandes, ya que la distancia entre ejes solo se ha extendido tres milímetros. El resto de las medidas son 2,13 metros de ancho y 1,67 metros de alto.
Entre sus mejoras, también se encuentra el apartado aerodinámico, gracias a la introducción de unas persianas de refrigeración activas y el rediseño de los paragolpes delantero y trasero. Su nuevo Cx es de solo 0,282. Los nuevos faros de led matriciales delanteros se conectan entre ellos mediante una banda luminosa horizontal en la parrilla delantera. Asimismo, las luces traseras opcionales con intermitentes animados incorporan una tira decorativa roja que une ambas ópticas a lo largo del maletero.
Interior rediseñado
Una vez se accede dentro del nuevo Kodiaq, se aprecia un mayor espacio y una renovación en el salpicadero. El confort de marcha también se ha elevado y el espacio para las plazas traseras sigue siendo de los mejores del segmento. Los materiales empleados para la construcción de las molduras, asientos y demás elementos ahora son más sostenibles y ecológicos, siguiendo los designios de todos los fabricantes para esta nueva era de los automóviles.
Poniendo la lupa en el salpicadero, llama la atención el nuevo cuadro de instrumentos. Una pieza de 10 pulgadas que incorpora nuevos gráficos y mucha más información, más allá de los relojes del velocímetro y las revoluciones.
Justo encima se sitúa el novedoso head-up display, incorporado por primera vez en este modelo. Por su parte, en la zona central aparece la nueva pantalla de infoentretenimiento de 13 pulgadas y justo debajo se ubican los innovadores botones diales de 32 milímetros de diámetro con pantallas digitales integradas.
Amplio abanico de motorizaciones
A la hora de mirar la oferta mecánica del nuevo Kodiaq, hay opciones para todos los gustos. La firma checa ha presentado cinco variantes. A saber, dos motores de gasolina, dos diésel y un híbrido enchufable, que ofrecen las tres etiquetas medioambientales más demandadas, es decir, las Cero, ECO y C. Los más altos de la gama se emparejan a la tracción total de serie y los cinco motores están asociados a una transmisión automática DSG.
El sistema de propulsión híbrido enchufable del Skoda Kodiaq entrega una potencia de 150 kW (204 CV) y una autonomía totalmente eléctrica de más de 100 kilómetros (WLTP). La tecnología microhíbrida se ofrece en el modelo básico 1.5 litros TSI con 110 kW (150 CV). La gama se completa con un motor de gasolina 2.0 TSI de 150 kW (204 CV) y dos motores diésel 2.0 TDI de 110 kW (150 CV) y 142 kW (193 CV), respectivamente.
Conectividad mejorada
Otra de las grandes novedades del SUV checo es la incorporación de nuevos servicios y la integración del afamado ChatGPT en el asistente de voz de la compañía, denominado Laura. Entre los servicios en línea, destaca la posibilidad de efectuar el pago automático en gasolineras seleccionadas. Esta función se denomina Pay to Fuel. Por su parte, el vehículo también es capaz de hacer el pago automático en las plazas de aparcamiento de diferentes ciudades (Pay to Park), sin recurrir a las máquinas de las aceras.
Entre sus nuevas funciones, el asistente de voz permite, gracias a la inteligencia artificial de ChatGPT, responder a preguntas más complejas de carácter general, además de controlar los sistemas de infoentretenimiento, navegación y aire acondicionado del vehículo. Para una mayor tranquilidad de los usuarios, la IA no accede a ninguna información sobre el vehículo ni a datos personales.
Sensaciones de conducción
Entre los numerosos premios que ha recibido el Skoda Kodiaq desde que se lanzó al mercado en 2016, hubo uno que demuestra el carácter particular del coche: Mejor coche del mundo para familias numerosas. En esta segunda generación, nada más acceder a él, queda claro que, por encima de cualquier otro aspecto, es un coche familiar y extremadamente confortable para realizar largos trayectos. El espacio interior permite acoger hasta a cinco adultos, cuatro de ellos de buen tamaño.
El conductor, por su parte, dispone de un asiento amplio y acogedor. Monta la palanca de cambios en la columna de dirección, en la zona derecha del volante, donde suele ir ubicada en otros modelos la manivela del limpiaparabrisas. Esto permite disponer de una consola central con un aspecto muy limpio y ordenado. Al tiempo que añade suficiente espacio adicional. Aunque para espacio, el de su maletero, hasta 910 litros, una de las cotas más altas de la categoría.
Nada más arrancar, se aprecia la baja rumorosidad de sus propulsores, ya sean los modelos de gasolina o diésel. A pesar de su peso (por encima de los 1.700 kilogramos en el diésel y algo más de dos toneladas en el microhíbrido e híbrido enchufable), las aceleraciones son contundentes y adelantar a otros vehículos se convierte en una tarea sencilla. Las suspensiones están puestas a punto de manera óptima, ofreciendo una comodidad en marcha muy alta. Además, en las versiones que montan amortiguadores controlados electrónicamente, la adaptación al terreno es superior.
Los motores no tienen un consumo elevado. El propulsor de gasolina de 150 CV (microhíbrido) y tracción delantera arrojó un gasto de 6,9 litros a los 100 kilómetros. Por su parte, el diésel más grande, el de 193 CV y tracción total, rebajó esa cifra hasta los 6,3 litros a los 100 kilómetros. En definitiva, y a falta de una prueba más exhaustiva, el nuevo Skoda Kodiaq es un rival muy a tener en cuenta para hacerse con el entorchado de los SUV por encima de los 4,70 metros de longitud.
Disponibilidad y precio
La segunda generación del Skoda Kodiaq ya se puede reservar en los concesionarios de la firma en España. En mayo se entregarán las primeras 160 unidades, únicamente de las versiones 1.5 TSI microhíbrida de gasolina (150 CV) y del diésel 2.0 TDI, también de 150 CV. En junio se lanzará el híbrido enchufable y a finales de año llegarán los modelos más potentes. Los precios comienzan de la siguiente manera:
- 1.5 TSI (150 CV) 4×2 microhíbrido: 44.300 euros.
- 2.0 TDI (150 CV) 4×2: 47.400 euros.
- 2.0 TDI (193 CV) 4×4: 50.450 euros.
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Entusiasta del motor en toda su magnitud, preferiblemente los V12. Le dijeron que cuatro ruedas eran mejor que dos, por eso se compró otra moto. Claro que también le apasiona cuando van las cuatro juntas. Ha trabajado como creativo publicitario para muchas marcas de coches y motos e hizo la mili en esto de juntar letras en la editorial Luike.