Menos de 60 segundos: este es el tiempo que un grupo criminal altamente especializado tardaba en robar vehículos. Este era, también, el punto de partida que daba forma a una red de venta de coches cuyo origen parecía legal. ¿Cómo actuaban?
La Policía Nacional ha desarticulado a esta organización y ha detenido a siete de sus miembros, que eran de origen búlgaro. A grandes rasgos, robaban coches en el extranjero, falsificaban sus elementos identificativos y, finalmente, los vendían en el mercado nacional.
Tal era su habilidad que algunos de ellos, como informa el Ministerio del Interior, son demandados por otras organizaciones criminales debido a la alta calidad de sus falsificaciones. Y es que, en ocasiones, es imposible identificar los vehículos robados si no hay una investigación policial de por medio.
Más información
Robo de coches en Bulgaria
Todo empezó en diciembre de 2023 cuando el Agregado de Interior de la Embajada de Bulgaria en España informó a la Policía Nacional de la presencia de varios coches que habían sido robados en Bulgaria, aunque su origen parecía legal.
La organización se dedicaba, presuntamente, al robo de vehículos de gama media-alta en Bulgaria: conseguía hacerse con ellos en menos de un minuto. La Policía Nacional apunta, únicamente, que para ello usaban sofisticadas herramientas tecnológicas que permitían apoderarse de cualquier modelo.
Rumbo a España
Después, proporcionaban a los vehículos una nueva identidad manipulando el número de bastidor, las etiquetas de constructor e incluso los registros digitales. Al mismo tiempo, daban forma a una documentación falsa empleando soportes originales robados en otros países como Austria con los que grababan datos falsos.
Con su nueva identidad, los coches se matriculaban en Bulgaria como si fueran modelos exportados de un tercer país y ponían rumbo a España. Aquí, gracias a la rama logística de la organización criminal, se introducían en el mercado como vehículos de ocasión.
Entre 30.000 y 40.000 euros por cada vehículo
En las inspecciones realizadas en Madrid y Cataluña, se han intervenido diez vehículos valorados en unos 350.000 euros. Y es que los miembros de la organización obtenían entre 30.000 y 40.000 euros por la venta de cada vehículo en el mercado de segunda mano. Eso sí, la investigación sigue en curso para la localización e inspección de más modelos.
Debido a la profesionalidad de las manipulaciones físicas y electrónicas, los coches pasaron desapercibidos en todos los controles técnicos realizados durante la matriculación. Esto hizo que, incluso, importantes concesionarios dedicados a la venta de vehículos de ocasión a nivel nacional los adquirieran porque no detectaron la estafa.
Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, Twitter o Instagram
Desde que aprendió a hablar y escribir, una de sus pasiones siempre fue contar todo lo que pasaba a su alrededor. Hizo las maletas y cambió Zaragoza por Madrid para estudiar Periodismo en la Universidad Complutense. Antes de graduarse, el mundo del motor se cruzó en su camino… y nunca lo ha abandonado.