El éxito fulgurante de Xiaomi en el mundo del automóvil hace que todo lo que ocurra con la marca de coches chinos se mire con lupa, especialmente si es algo que se sale fuera de lo común. Y no hay nada más raro que los frenos de un coche se incendien, aunque desde la compañía apunten lo contrario.
En los últimos días se ha hecho viral un vídeo en el que se puede ver como, de las pastillas de freno de un Xiaomi YU7, salían llamas. Se trataba de un ejemplar de la versión Max, la más deportiva del modelo, tras rodar en circuito. Sin embargo, no eran unos frenos incandescentes, como suele ocurrir cuando los discos se ven sometidos a mucho estrés, si no fuego, lo que hizo saltar la alarma.
Más información
A pesar de ello, Xiaomi ha querido quitar hierro al asunto. La propia marca habló sobre el tema en una sesión de preguntas y respuestas celebrada en Weibo. De hecho, fue la primera cuestión que se planteó, ante lo que respondió de manera directa.
“En el video, el Xiaomi YU7 Max completó una vuelta de calentamiento y una vuelta rápida en el circuito Tianjin V1 y luego se estacionó sin dar vueltas de enfriamiento. La alta temperatura provocó que los materiales orgánicos de las pastillas de freno se incendiaran, pero el sistema de frenos en general no presentó problemas de fallas y su funcionamiento se mantuvo intacto y en uso normal”, comenzaba.
“Al conducir en circuito, los vehículos suelen necesitar frenadas de emergencia frecuentes a velocidades ultrarrápidas, lo que somete al sistema de frenos a una carga mucho mayor que en la conducción diaria. En estas condiciones, la temperatura del disco de freno aumenta bruscamente y, si no se disipa el calor eficazmente, el material puede incendiarse. Al mismo tiempo, al ser un SUV mediano-grande, el Xiaomi YU7 es más pesado que los SUV más pequeños. Su alta potencia permite alcanzar velocidades más altas en circuito y el calor generado por el sistema de frenos durante frenadas bruscas es más evidente. Por lo tanto, una disipación de calor eficaz es fundamental y un requisito básico para conducir en circuito”, añadía.
“El Xiaomi YU7 Max utiliza pastillas de freno con bajo contenido de metal, fabricadas con fibras metálicas, abrasivos, resinas y otros materiales orgánicos. Las resinas y otros materiales orgánicos producen reacciones de agrietamiento de polímeros a altas temperaturas (generalmente superiores a 300 °C), lo que produce gases como agua, monóxido de carbono, dióxido de carbono y gases aromáticos. Algunos gases inflamables pueden producir llamas abiertas a corto plazo a altas temperaturas (generalmente, temperaturas del disco de freno superiores a 600 °C) y en un entorno con suficiente oxígeno. Este es un fenómeno físico normal, pero la capacidad de frenado no se verá afectada”, concluía.
Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, X o Instagram