Sí que coinciden en una parte fundamental, como son las ventajas que supone desplazarse con estos vehículos de dos ruedas en comparación con los de cuatro: la rapidez de movimiento, la facilidad de aparcamiento, la menor contaminación o el ahorro de combustible hacen de motocicletas y ciclomotores una de las mejores opciones para la movilidad de hoy en día.
Por lo demás, ambos cuentan con un chasis, un manillar, dos ruedas, luces, intermitentes y demás elementos para circular, pero no son lo mismo. Las diferencias comienzan en el tamaño, la edad para conducirlos, el tipo de carné o licencia y las placas de la matrícula.
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Los motores
Según dictamina la DGT, los ciclomotores son vehículos que están provistos de un motor con una cilindrada no superior a 50 centímetros cúbicos y con una velocidad máxima por homologación no superior a 45 km/h.
Por su parte, las motocicletas cuentan con un motor con una cilindrada superior a los 50 cc y una velocidad máxima por construcción por encima de los 45 kilómetros por hora. Esta es una de las primeras fronteras que separan a los ciclomotores de las motocicletas.
Permisos de conducir
Otra línea de división son los carnés. Los ciclomotores se pueden conducir desde los 15 años con el permiso de conducción AM, pero los pilotos no están facultados para llevar pasajero hasta que cumplan los 18 años.
Mientras tanto, para conducir una motocicleta hay que estar en posesión del permiso A1 y la edad mínima exigida son 16 años, que permite circular con motos de hasta 125 centímetros cúbicos. Por lo tanto, la edad marca otra de las diferencias importantes. También se pueden conducir motocicletas hasta esa cilindrada con el carné B de coches (siempre que se tengan al menos 21 años de edad y tres años de antigüedad en el permiso).
Vías de circulación
Las diferencias son considerables en las vías de circulación. Según la DGT, en carreteras interurbanas “los ciclomotores solo tienen permitido circular por el arcén de su derecha, si fuera transitable y suficiente, y, si no lo fuera, utilizarán la parte imprescindible de la calzada”. Además, tienen prohibida la circulación por autopistas y autovías.
En cambio las motocicletas, pueden circular por cualquier tipo de vía en la que esté permitida la circulación.
Las matrículas
Para quien tenga dudas en la calle, hay un modo de distinguir rápidamente un ciclomotor de una motocicleta. Los ciclomotores montan una matrícula estrecha vertical con fondo amarillo y números en color negro. Las matrículas comienzan por la letra C (ciclomotor) seguida de una serie de tres números y otra serie de tres letras.
Las matrículas de las motocicletas son las características de fondo blanco y números negros, como las de los turismos. Cuentan con la banda azul europea y una serie de cuatro números y tres letras. Son de un tamaño más cuadrado que la de los coches para adaptarse a las dimensiones de las zagas de las motos.
A simple vista
También existen variaciones en el apartado estético de ambas. A simple vista se pueden distinguir los ciclomotores de las motocicletas por el tamaño. Los primeros siempre cuentan con unas dimensiones menores. Incluso la motocicleta de menor cilindrada suele ser más grande. El tamaño de las llantas también puede ofrecer una distinción entre ambos vehículos, ya que las de los ciclomotores son de menor de diámetro comparadas con las de las motocicletas.
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Entusiasta del motor en toda su magnitud, preferiblemente los V12. Le dijeron que cuatro ruedas eran mejor que dos, por eso se compró otra moto. Claro que también le apasiona cuando van las cuatro juntas. Ha trabajado como creativo publicitario para muchas marcas de coches y motos e hizo la mili en esto de juntar letras en la editorial Luike.