Que las motos ganan peso en la movilidad se aprecia a diario en las ciudades y en la carretera, y que la pandemia “ha acelerado la transformación” lo sostiene José María Riaño, secretario general de la patronal de las dos ruedas ANESDOR. Desde la perspectiva de su cargo, y apoyado por los datos, Riaño resume en cinco motivos el crecimiento del sector: “La moto emite poco, reduce la congestión urbana, minimiza los tiempos, ayuda a la conciliación y es el más económico de los vehículos motorizados. Y esta es la realidad que observamos en tiempos de pandemia: la moto crece como herramienta de movilidad”.
Las cifras de ventas refuerzan los argumentos de ANESDOR, que ha participado junto con Motos.net en un estudio que evalúa la situación del sector motociclista y sus usuarios: durante el primer semestre de este año, el mercado de motos y ciclomotores (nuevos y usados) creció un 3,7% respecto a 2019.
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El informe revela otros datos significativos, como que los usuarios de motos recorren como media más de 23 kilómetros diarios. Además, el 50% de los motoristas afirma que usa la moto todos los días, y principalmente para trayectos que combinan vías urbanas e interurbanos (66%).
Son minoría quienes se ponen al manillar solo en carretera (25%) o solo en ciudad (7%), de lo que Riaño deduce un uso elevado como medio de transporte principal. “El discurso político se centra en el transporte público y en la promoción de la bici y de los desplazamientos a pie, lo cual está muy bien, pero eso no cubre el 100% de las necesidades de movilidad. La gente viaja desde el extrarradio de las grandes ciudades y no tiene opciones de transporte: si los motoristas hacen estas distancias [23 kilómetros diarios], esto quiere decir que la moto es una muy buena solución para la movilidad del día a día. Tendría su lógica que las ciudades tuviesen esto en cuenta para facilitar su uso”, argumenta.
Obstáculos
Sin embargo, según el estudio, los motoristas se topan con numerosas trabas. “La gente sigue creyendo que tiene obstáculos. La movilidad de la ciudad se diseñó para el coche y ahora se está orientando a los patinetes, pero el 80% de las víctimas de siniestros urbanos son usuarios vulnerables, en gran medida peatones y motoristas. Tenemos que hacer un diseño de ciudad más seguro para ellos”, considera el representante de ANESDOR.
En este escenario, el informe refleja que el 61% de los usuarios de moto considera que el asfalto por el que circulan no es el adecuado. De hecho, el firme en mal estado y la pintura deslizante, en conjunto, son uno de los principales factores que generan inseguridad entre los conductores (42%), solo superado por el resto de vehículos (44%).
Tampoco convencen a los motoristas las normativas y restricciones urbanas. Por un lado, casi seis de cada diez usuarios están en contra de la limitación a 30 km/h en algunas calles. Por otra parte, un porcentaje superior (65%) se queja de las restricciones ambientales que se aplican a los vehículos de dos ruedas: el etiquetado de la DGT les afecta lo mismo que a los turismos, pero, dice Riaño, “una moto con etiqueta C no contamina igual que un coche” con ese distintivo ambiental.
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Periodista especializado en seguridad vial. Editor y redactor de El Motor desde 2016. Empezó a escribir de fútbol en 1998 en Diario 16 y ha trabajado en varios proyectos de Prisa Media desde 2000. Licenciado en Periodismo por la Universidad de Navarra, es autor de ‘Aquí no se rinde ni Dios’ (2020).