Peugeot 308 Plug-In Hybrid 225: suavidad y eficiencia sin dejar de lado las prestaciones

Se trata de la tercera generación de un compacto que siempre ha estado entre los preferidos de los españoles. No ha cambiado la plataforma sobre la que se construye, EMP2, pero sí que ha evolucionado mucho en sus componentes y en una imagen muy moderna que llama poderosamente la atención.

Con una longitud de 4,37 metros, una anchura de 1,85 metros y una altura de 1,44 metros, este Peugeot 308 es un compacto que, desde fuera se ve bajo y ancho, con pinta de circular muy aplomado en carretera.

Pero si se dejan de lado las conjeturas, que luego se verán más a fondo, es un modelo en el que se ha cuidado mucho la estética, para empezar con unos faros afilados que culminan una espectacular parrilla y que terminan en una luz vertical exterior.

Por detrás, también los pilotos parecen unirse, gracias a una moldura oscura que recorre todo el centro y que, sobre todo, llama la atención en su parte baja gracias a los embellecedores de las salidas del escape.

Interior digitalizado

Esta generación ha supuesto la entrada de lleno del modelo en la era digital, gracias a un equipo multimedia avanzado, a mandos táctiles y a sus dos pantallas digitales, tanto la de instrumentos como la de infoentretenimiento, de 10 pulgadas cada una.

Ambas muestran unos gráficos modernos y de buena resolución, con demasiada información a veces detrás del volante, pero el principal problema sigue siendo el denominado i-Cockpit. A pesar de que responsables de la marca aseguran que sus estudios internos les dicen que es un elemento que gusta a sus clientes, sigue siendo difícil ver esta instrumentación, ya que se sitúa muy arriba y la parte alta del volante suele taparla, al menos parcialmente.

Esto se soluciona bajando el volante mucho y situándolo sobre las piernas, en una posición bastante antinatural para conducir. Pero esto dependerá de la estatura del conductor y de su postura ideal.

Debajo de la pantalla del sistema de infoentretenimiento hay una superficie con botones táctiles que Peugeot llama i-toggle (alternar o cambiar en inglés) que da acceso rápido a algunas funciones como el navegador, la climatización o el teléfono. Por debajo de esta pantalla también hay algunos interruptores tradicionales para accionar más funciones.

Respecto a la comodidad y su espacio a bordo, delante no hay problema en ningún sentido, pero detrás sí que lo habrá si los pasajeros son adultos. El espacio no abunda en ninguna cota y si ya los delanteros son grandes, detrás irán bastante justos.

Tampoco hay demasiada amplitud en el maletero. Más en esta versión híbrida enchufable, ya que pierde unos 50 litros respecto a otras versiones, quedándose en 361 litros.

Potencia con suavidad

El Peugeot 308 PHEV 225 CV, y como su nombre indica, equipa un sistema de propulsión híbrido enchufable. Está compuesto por un motor de gasolina 1.6 turbo de 180 CV de potencia, que se combina con otro eléctrico de 81 kW (110 CV) y que, juntos, ofrecen una potencia de 225 CV.

Al ponerse al volante, se aprecia de inmediato la suavidad y la respuesta del sistema híbrido. Con esa potencia de más de 200 CV, el 308 PHEV ofrece una aceleración rápida y una entrega de potencia sin esfuerzo, ya sea en modo totalmente eléctrico, híbrido o en modo deportivo.

Sus prestaciones así lo atestiguan: pasa de 0 a 100 km/h en solo 7,5 segundos y alcanza los 235 km/h de velocidad máxima. Y eso que no es un peso pluma; da en báscula algo más de 1.700 kilos.

Cuenta con una pequeña batería de 12 kWh que cuenta con una garantía de 8 años o 160.000 kilómetros para el 70% de su capacidad. De serie se incluye un equipo de recarga a 3,7 kW que permite realizar una carga completa en algo más de siete horas en un enchufe doméstico normal. Opcionalmente se puede pedir un cargador de 7,4 kW que reduce el tiempo de carga a 1,55 horas (en una estación de carga de 32 A).

La autonomía eléctrica teórica supera los 60 kilómetros, lo que le vale para poder lucir la etiqueta Cero. Pero también es verdad que en la práctica, se podrán recorrer poco más de 50. Eso sí, en este modo eléctrico, el silencio hace que la conducción sea especialmente placentera en entornos urbanos.

El cambio entre los modos de conducción (Sport, Normal y Eco) es fluido y se adapta fácilmente a las condiciones de la carretera y a las preferencias del conductor. Igual de fluidos son las transiciones de su cambio automático de ocho velocidades, que se maneja a través de un mando muy práctico, por su mínimo tamaño.

Pero, además de su rendimiento dinámico, el 308 PHEV también sorprende por su manejo ágil y su dirección precisa. Que no lo puede ser tanto, por falta de confianza en su volante, pequeño y sobre todo, si se posiciona más abajo de lo ergonómicamente recomendable.

La suspensión bien ajustada se traga los baches de una manera sobresaliente, mientras que la carrocería no balancea mucho en carreteras reviradas, lo que proporciona un equilibrio dinámico muy alto. Esto se completa con un nivel de sonoridad a bordo muy bajo, lo que hace que cualquier trayecto sea de lo más agradable, incluidos por supuesto, largos viajes. Esto se debe, entre otras cosas, a su parabrisas delantero acústico de 4,46 milímetros.

Respecto al consumo, en modo eléctrico, se mueve a razón de unos 17 o 18 kWh/100 km en ciudad y unos 25 kWh en carretera. Si se acaba la carga, el consumo tampoco es excesivo y no está muy lejos de otros compactos de gasolina sin ninguna hibridación, ya que se sitúa entre los 6-7 l/100 km.

Precio y equipamiento

Este es el 308 más completo, potente y tecnológico de la gama, así que su precio refleja tan elevada condición: 42.080 euros.

Por 1.500 euros menos tenemos la versión con 180 CV, que no se ha probado, pero no parece una diferencia significativa y, a priori, parece mejor comprar el más potente.

Eso sí, el único acabado disponible en esta versión es el GT, con un gran equipamiento en el que destacan elementos como, por ejemplo, la cámara de visión trasera, acceso y arranque manos libres, volante calefactable, llantas de 18 pulgadas, etcétera.

En resumen, el Peugeot 308 PHEV 225 CV ofrece una combinación muy recomendable de rendimiento, eficiencia y estilo. Con su tecnología híbrida, su equilibrado dinamismo y su futurista diseño, este modelo se posiciona como una opción destacada y muy recomendable en el segmento de los compactos híbridos enchufables.