Hace solo unos días, Mónaco se convirtió en un escenario aún más exclusivo, al menos en lo que al mundo del motor se refiere. Fue allí donde se celebró la subasta de MonacoCar Auction protagonizada, exclusivamente, por modelos de Ferrari. Entre ellos estaba el Enzo de Alonso: ¿qué ha pasado con él?
Eran varios los modelos que destacaban entre los 40 que, el pasado 8 de junio, salieron a la venta. El de Fernando Alonso no sólo acaparó los focos por la identidad de su propietario: también porque es el Scocca N.1, es decir, tiene el chásis número uno de la serie. Y, además, hay que tener en cuenta que su producción fue limitada.
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Alonso se queda con su Enzo
No obstante, ser el Ferrari Enzo de un bicampeón de Fórmula 1 no ha sido suficiente para que encontrara un nuevo dueño. MonacoCar Auctions ha confirmado que el deportivo italiano no se vendió, aunque no aporta detalles sobre los motivos.
La cuenta de Twitter ‘Aston Martin F1 Updates’ asegura que la subasta del Ferrari Enzo de Fernando Alonso comenzó en 4,2 millones de euros: las estimaciones previas hablaban de una cifra de entre 5 y 5,5 millones de euros. Finalmente, no consiguieron venderlo y el piloto asturiano sigue siendo su propietario.
Lo cierto es que el precio de las últimas unidades del Ferrari Enzo que han protagonizado este tipo de pujas ha estado en torno a los tres millones euros. En 2015, un ejemplar fue subastado en Sotheby’s por 5,6 millones de euros.
El Ferrari Enzo de Fernando Alonso no ha sido un caso aislado: de los 40 modelos italianos que se subastaron, únicamente se vendieron 15 y tan solo tres alcanzaron la cifra de salida. Un Ferrari 250 GT Boano ha sido el más caro de todos: alguien pagó por él 1.350.000 euros.
Un deportivo muy especial
Fernando Alonso compró su, todavía, Ferrari Enzo entre 2010 y 2014. A pesar del tiempo transcurrido, sólo ha recorrido 4.800 kilómetros y está en perfecto estado. Fue concebido para suplir al Ferrari F50 y de las líneas de producción solo salieron 400 unidades: en aquel momento costaba unos 600.000 euros. Una cifra que, obviamente, se ha revalorizado.
El Ferrari Enzo está impulsado por un V12 de seis litros, que desarrolla una potencia de 660 CV. Con él, alcanza una velocidad punta de 350 km/h y ofrece un rendimiento de primer nivel: hay que recordar que su peso es inferior a 1.300 kilos.
Lo cierto es que Fernando Alonso no es el único piloto de F1 que con un Ferrari Enzo en su garaje. Kimi Raikkönen y Michael Schumacher también se rindieron a sus bondades. La unidad del alemán, además, estaba personalizada con su logo y con equipamiento inédito, sin olvidar su firma y la de Luca di Montezemolo, anterior presidente de la marca italiana.
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