El 5G se está implantando a pasos acelerados en Europa para dar cabida a toda una nueva generación de servicios. Desde la comunicación entre vehículos hasta las prestaciones del Internet de la cosas (la red de objetos físicos que se conectan a la red, o la telemedicina.
Esta nueva generación de tecnología móvil inalámbrica supera con creces a los estándares que ofrece el 4G. Destaca por la velocidad de transmisión de datos, pudiendo ofrecer hasta 20 GB por segundo, entre 100 y 1.000 veces más rápido que las conexiones actuales.
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El otro gran punto a favor es la latencia, que disminuye de manera considerable. Gracias al 5G, se obtienen tiempos de respuesta mucho menores (de entre 15 y 50 milisegundos), casi sin retardo y prácticamente en tiempo real. Diez veces más rápidos que los que aporta la tecnología 4G.
Ventajas del 5G en la automoción
Esa menor latencia y la mayor velocidad de transmisión de datos va a revolucionar la automoción. La interconexión entre vehículos, ciudades, carreteras, señales de tráfico y transeúntes supondrá una enorme mejora para la conducción. Desde la reducción de accidentes de tráfico hasta el esperado desembarco de los vehículos autónomos. Las posibilidades de comunicación son varias:
- Vehículo a Vehículo (V2V). Es la manera en que los coches van a hablar entre sí para advertir de las diferentes amenazas. Lanzarán alertas de accidentes, retenciones, estado de la carretera o meteorología para poder ofrecer, por ejemplo, rutas alternativas.
- Vehículo a Infraestructura (V2I). Al igual que con otros vehículos, también se intercambiará información con las infraestructuras, ya sea la propia carretera, los semáforos o los aparcamientos. De esta manera, se conocerá con antelación dónde hay una plaza libre cerca del destino al que se dirige el vehículo.
- Vehículo a Dispositivo (V2D). El vehículo también se puede conectar con cualquier dispositivo, por ejemplo el móvil de los peatones, para identificar la posición exacta en todo momento y así evitar accidentes.
- Vehículo a Todo (V2X). Esta tecnología es el compendio de todas las anteriores y será la base de la futura conectividad para la conducción autónoma. En el futuro y gracias al internet de las cosas, los vehículos estarán interconectados con todo, desde la farola de la calle a los dispositivos portátiles de los conductores o transeúntes.
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