Euro 7: la buena noticia de Bruselas para los compradores de coches

Los vehículos nuevos se rigen por la normativa Euro 6d desde 2015, y todo parecía indicar que la nueva Euro 7 entraría en vigor, tal y como estaba previsto, el 1 de julio de 2025. Sin embargo, habrá que esperar, ya que los países miembros de la Unión Europea (UE) han decidido, por unanimidad, retrasar la puesta en marcha de la nueva reglamentación sobre emisiones hasta 2027.

Esta norma, que establece requisitos más adecuados para las emisiones de los vehículos, tuvo a ocho países en clara oposición desde el principio: Italia, Francia, República Checa, Bulgaria, Hungría, Polonia, Rumanía y Eslovaquia. Además, la industria automotriz también mostraba su rechazo debido al alto coste de las inversiones a realizar en cada modelo nuevo que saliera al mercado.

Normativas Euro

Como se ha mencionado, en estos momentos los fabricantes de automóviles tienen que cumplir con la normativa Euro 6d. La Unión Europea diseñó en los años noventa una hoja de ruta para rebajar las emisiones contaminantes que los vehículos a motor emitían a la atmósfera. De esta manera, se regularía de forma progresiva, y cada vez más restrictiva, estas emisiones.

Las distintas reglamentaciones han ido regulando las partículas contaminantes de los motores de combustión interna, ya fueran diésel o gasolina. Entre otras partículas, el foco ha estado puesto en los óxidos de nitrógeno (NOX), el monóxido de carbono (CO) y los hidrocarburos (HC).

La Euro 1 entró en vigor en julio de 1992 y desde entonces se han ido aplicando medidas cada vez más restrictivas. El objetivo es que en 2030 las emisiones de gases de efecto invernadero se reduzcan un 55% en comparación con 1990.

Euro 7 para 2027

En un principio, la Euro 7 debía endurecer las exigencias respecto a los límites actuales. Los motores de gasolina están sujetos actualmente a un límite de 100 mg/km de monóxido de carbono (CO); con la nueva legislación, debían rebajarlo a la mitad: 50 mg/km. Los propulsores diésel ya cumplen con este requisito.

Por su parte, los motores de gasoil debían rebajar sus emisiones de óxidos de nitrógeno (NOX) de los 80 mg/km máximos actuales a los 60 mg/km. Los vehículos de gasolina, al estar ya sujetos a este límite, no estaban obligados a hacer ningún ajuste.

El pasado 5 de mayo, ocho países europeos, encabezados por Italia, firmaron un escrito en el que expresaron su oposición a la Euro 7. En él afirmaban que el nuevo estándar propuesto por la Comisión Europea podría “obstaculizar las inversiones de los fabricantes en vehículos eléctricos”. Ahora todo ha cambiado.

Aumento en el precio de los coches

La Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA) ya advirtió, hace unos meses, que sería necesario invertir una cantidad de alrededor de 2.000 euros en cada coche para cumplir con la normativa Euro 7, unas 10 veces más de lo que había calculado la Unión Europea.

Esta cifra se vería aumentada en unos 1.000 euros más hasta llegar al concesionario, por lo que una persona que comprara el mismo automóvil, con el mismo acabado y extras, pagaría 3.000 euros más al adquirirlo con la Euro 7 en vez de con la Euro 6d. Al posponer en dos años la medida, países como España verán aliviada la construcción de nuevos modelos.

Además, no solo se retrasa la medida hasta 2027, sino que los ministros de Industria y Comercio de la UE también han conseguido suavizar las restricciones de la Euro 7 que en un principio había propuesto el Consejo Europeo. Así, se van a mantener los límites actuales de emisiones y las condiciones de prueba para los vehículos ligeros.