Volvo EX90: la revolución silenciosa de los 800 voltios que cambia el futuro eléctrico

Durante años, los tiempos de recarga han sido uno de los grandes obstáculos para la expansión del coche eléctrico. Ese talón de Aquiles de la electrificación ha generado dudas entre los conductores, acostumbrados a repostar en pocos minutos. Sin embargo, esa barrera está a punto de desaparecer.

La llegada de la arquitectura eléctrica de 800 voltios, una tecnología que ya incorporan algunos de los modelos más avanzados de las marcas más prestigiosas del mercado, promete reducir drásticamente los tiempos de carga, mejorar la eficiencia energética y abrir una nueva etapa en la movilidad eléctrica.

Lo cierto es que la electrificación del automóvil ya no es una promesa de futuro. Es presente. Y en ese presente, el Volvo EX90 emerge como el estandarte tecnológico de la firma sueca. Un SUV 100 % eléctrico que combina el diseño escandinavo, la seguridad avanzada y una nueva arquitectura eléctrica de 800 voltios que marca un antes y un después en la eficiencia, el rendimiento y la experiencia de conducción.

De los 400 a los 800 voltios

Hasta ahora, la mayoría de los coches eléctricos funcionaban con sistemas de 400 voltios. Volvo ha duplicado esa cantidad en el EX90, y el cambio se traduce en mejoras tangibles. La nueva arquitectura reduce la generación de calor durante la carga, mejora la eficiencia energética y permite tiempos de recarga mucho más cortos.

Gracias a esta innovación, el EX90 puede recuperar hasta 250 kilómetros de autonomía en solo 10 minutos con cargadores de hasta 350 kW. Una diferencia que cambia la experiencia del usuario: menos esperas, más autonomía y mayor libertad a la hora de afrontar viajes.

Volvo EX90: eficiencia y rendimiento

El sistema de 800 voltios no solo carga más rápido, sino que optimiza la energía y mejora la respuesta del vehículo. Al reducir las pérdidas de calor, la batería trabaja de forma más eficiente y duradera. Esto contribuye a un menor consumo y también a una mayor sostenibilidad a largo plazo.

Además, esta arquitectura permite alimentar motores más potentes sin comprometer la estabilidad energética. El EX90 se ofrece en versiones Twin Motor (408 CV) y Twin Motor Performance (517 CV), con una aceleración de 0 a 100 km/h en apenas 4,9 segundos. Su batería de 111 kWh ofrece hasta 619 kilómetros de autonomía WLTP, situándolo entre los SUV eléctricos con mayor rango del mercado.

Tecnología amigable

El EX90 no se limita a ofrecer potencia y eficiencia. Su ordenador central de doble núcleo NVIDIA DRIVE AGX Orin alcanza los 500 TOPS de capacidad de cálculo, lo que permite que el vehículo mejore continuamente mediante actualizaciones inalámbricas (OTA). El sistema es además compatible con tecnologías como la V2G, que propicia utilizar el coche como fuente de energía doméstica o para devolver electricidad a la red.

Y es que el Volvo EX90 no solo representa el futuro de la marca, sino también una nueva manera de entender el coche eléctrico. Su arquitectura de 800 voltios es más que una cifra: es el corazón invisible de una revolución silenciosa. Un salto hacia una marca donde la tecnología, la eficiencia y la seguridad conviven en armonía.