La señal desconocida que todos los conductores ven y pocos entienden: evita la multa

Aunque las señales horizontales tienen el mismo valor legal que las verticales, no siempre son igual de conocidas por los conductores. Algunas generan cierta confusión, precisamente, por estar pintadas sobre el asfalto y no en un poste.

La señal de damero toma su nombre del clásico tablero de ajedrez, ya que su diseño se basa en cuadros alternos. Están pensadas para mejorar la fluidez del tráfico en zonas especialmente conflictivas.

Cuando la señal de damero aparece en blanco y negro, su función principal es mejorar la gestión del tráfico en zonas con alta densidad de vehículos. Es habitual verla en intersecciones complejas, donde confluyen varios carriles o diferentes tipos de transporte como coches, motos, bicicletas o autobuses.

Señal de damero blanca y roja

Su objetivo es claro: evitar que los vehículos se detengan en medio del cruce. Al mantener despejada la intersección, se reducen las posibilidades de colisión y se facilita una circulación más fluida y segura, tanto para los conductores como para los peatones.

Eso sí, no siempre es blanca y negra: también puede aparecer en blanco y rojo: en este caso advierte de la presencia de una zona de frenado de emergencia. Estas zonas están diseñadas para detener vehículos que, por una avería o fallo en los frenos, no pueden hacerlo por sí mismos. Suelen encontrarse en tramos con fuertes pendientes, normalmente en el carril derecho.

Barcelona: un caso particular

En ciudades como Barcelona, la señal de damero también se utiliza para regular el comportamiento de los ciclistas. En los tramos de carril bici que cruzan pasos de peatones, esta cuadrícula indica que las bicicletas deben ceder el paso a los viandantes. Ignorar esta norma puede suponer una multa de hasta 200 euros.

Más allá del caso concreto de los ciclistas, no respetar las señales de damero conlleva sanciones para todos los usuarios de la vía. Está prohibido detenerse dentro del área marcada por esta señal, incluso si el semáforo está en verde. Incumplir esta norma puede acarrear una multa de 200 euros, tanto para conductores como para ciclistas y usuarios de patinetes.

Además, quienes hagan un uso indebido de las zonas de frenado de emergencia también se enfrentan a la misma sanción económica. En situaciones más graves, estas infracciones podrían incluso suponer la pérdida de puntos del carnet de conducir.