Porsche Macan 2019: más potente y sin motores diésel

El Porsche Macan, el modelo que ha marcado el paso desde 2013 a los SUV más deportivos (Audi Q5, Alfa Romeo Stelvio, BMW X4, Jaguar F-Pace…) ha matriculado desde entonces 357.000 unidades, siendo el Porsche más vendido. Y ahora se renueva y pone al día, sobre todo para estar conforme con la última evolución normativa medioambiental sobre emisiones Euro 6d-Temp. El todocamino recién actualizado llegará este mismo mes a partir de 66.400 euros y la versión S lo hará el próximo marzo con un precio de 75.421 euros.

Para cumplir con la normativa de emisiones, el Porsche Macan se centra en dos motores de gasolina, renunciando definitivamente a las versiones diésel. El primero es el 4 cilindros 2.0 de 245 CV ya conocido anteriormente (y que no es otro que un TFSI de origen Audi-Volkswagen). Ha sido revisado y adaptado a las nuevas exigencias medioambientales, perdiendo un poco de potencia (7 CV) pero incorporando un filtro de partículas y mejorando su eficiencia en cuanto a consumo (8,1 l/100 km).

El segundo motor es un inédito V6 3.0 con turbocompresor derivado del que ya llevan el Cayenne y el Panamera. Es la gran novedad del nuevo Porsche Macan y da pie a su versión S, con una potencia de 354 CV, por lo tanto 14 CV más que el anterior V6 con un incremento no menos importante de 20 Nm en su par motor (8,9 l/100 km).

Dos potencias y chasis mejorado

En la primera toma de contacto, el Macan normal demostró ser un coche muy homogéneo, de suaves respuestas y de conducción fácil y agradable en cualquier circunstancia. Pero resulta un tanto impersonal para tratarse de un Porsche. Hay que recordar que este modelo está basado en el Audi Q5 de 2008 y su peso (1.795 kg según normas DIN) penaliza las respuestas. El Porsche Macan acelera de 0 a 100 km/h en 6,7 segundos, rápido pero no lo suficiente para ser todo un Porsche. Eso sí, las opciones pueden aportar más sensaciones a la conducción en forma de un escape deportivo de sonido más ronco, una dirección de asistencia variable más directa o la suspensión neumática regulable que permite rebajar 4 centímetros el centro de gravedad.

Pero habrá que recurrir al Macan S para encontrar la auténtica deportividad que sugiere la marca. Equipando el paquete Sport Chrono, que permite acelerar a máxima potencia durante 20 segundos antes de cortar la inyección, la versión V6 de 354 CV acelera de 0 a 100 km/h en 5,1 segundos, un valor ya digno de un verdadero coche deportivo y mejora al anterior en 0,1 segundos.

La respuesta en el Porsche Macan S es mucho más contundente, y tanto la potencia del motor como el buen hacer del cambio automático y la transmisión 4×4 compensan el exceso de peso de este modelo que en la versión S alcanza 1.865 kg según la norma DIN. Además se pueden elegir cuatro modos distintos de conducción Comfort, Sport, Sport Plus o Individual para adecuar las respuestas de motor y chasis a diferentes circunstancias.

Por otra parte, las mejoras en el chasis (relacionadas con la puesta a punto del sistema de tracción integral), los brazos de suspensión delantera de aluminio más ligeros, los frenos y el tarado de las barras estabilizadoras mejoran el comportamiento dinámico.  

Las novedades mecánicas han sido las más importantes, ya que estéticamente el nuevo Porsche Macan no se diferencia casi del anterior. Los cambios se reducen a detalles como el rediseño de las entradas laterales de aire en el frontal, la desaparición de los faros antiniebla (ahora integrados en la iluminación led de serie, que puede incorporar opcionalmente un sistema que distribuye el haz de luz allí donde se necesita ver) y, lo más llamativo en el exterior, la banda trasera de luces led tridimensionales.

Por dentro destaca una nueva pantalla táctil de 10,9 pulgadas (antes era de 7,2 pulgadas) que ofrece entre otras funciones de serie navegación con información de tráfico en tiempo real, conexión al teléfono móvil, audio y control por voz. En cuanto al equipo opcional, el nuevo Macan incluye también nuevas posibilidades como el volante deportivo, sistema ionizador del aire y asistente de atascos para no tener que conducir en las retenciones.