La señalización vial, de cualquier tipo, va evolucionando a medida que se detectan nuevos retos para mantener la seguridad vial. No obstante, no solo estas nuevas necesidades son un problema para la eficacia de las señales y las marcas de las carreteras.
Las condiciones de conducción también afectan a cómo los conductores perciben las señales. Si bien las marcas pintadas en las carreteras cuentan con tratamientos reflectantes para mejorar su visión nocturna, su eficacia no es siempre la deseable.
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La empresa australiana Tarmac Linemarking ha desarrollado una nueva técnica para que las líneas de la carretera sean siempre altamente visibles. Esta idea sería una solución perfecta para la falta de visibilidad en ciertas carreteras, como las zonas rurales de España. Se trata de una pintura que brilla en la oscuridad, permitiendo que los conductores vean a la perfección las marcas viales.
A la hora de implementar este sistema en las carreteras y favorecer su aplicación, Tarmac comercializa grandes rollos de este material termoplástico que emulan a los de cinta aislante. Así, solamente hay que pegarlo encima de la línea que se quiera, en vez de repintar todas las líneas viales.
Es efectiva, pero cara
El estado de Victoria (Australia) fue el primero en trabajar en el desarrollo de esta pintura revolucionaria. Y es que en este país hay largos tramos de carretera sin buena iluminación. La aplicación de estas nuevas líneas es muy útil en Australia, donde es habitual que haya largos tramos de carretera sin buena iluminación.
Las mejoras en materia de seguridad vial de esta pintura son claras y, de hecho, desde que se presentó hace más de dos años no solo se ha probado en Australia. Malasia ha utilizado esta pintura reflectante en 245 metros de carretera en el distrito de Hulu Langat. En Holanda también han probado este material en sus calzadas.
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Pese a la buena acogida y eficacia del proyecto en Malasia, el coste de esta pintura retroiluminada es 20 veces más elevado que la normal, por lo que las autoridades ya han confirmado que no implementarán este novedoso sistema en el resto de su red viaria.
De hecho, en Australia el plan de desarrollo de esta tecnología contó con una inversión gubernamental de 245 millones de dólares australianos (163 millones de euros), destinados a un programa de seguridad vial centrado en soluciones innovadoras.
Cómo funciona la pintura que brilla en la oscuridad
El funcionamiento de estas marcas es muy sencillo. Las líneas autoluminiscentes están revestidas del mismo material que siempre se ha usado, por ejemplo, en las decoraciones que pueden pegarse en techos y ventanas y que brillan en la oscuridad. Este material acumula durante el día la luz del sol y, por la noche, la libera. Así, parece que las líneas se iluminan sin necesidad de luces externas.

La empresa fabricante las califica como “un producto excepcional para peatones y carriles de bicicleta, caminos, intersecciones y otras aplicaciones más”. Una polivalencia que destaca entre las cualidades de la invención, ya que incrementa de forma significativa la seguridad no solo para los automovilistas, sino también para el resto de los ocupantes de la vía.
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