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Dentro de las fechas ineludibles del mundo del motor, Pebble Beach cuenta con un lugar especial. Este concurso de elegancia se convierte en una exquisita pasarela que congrega a modelos clásicos de alta categoría. De ellos, se elige el más bonito: este año ha sido un Mercedes con un curioso secreto.
En 2023, el ‘Best of Show’ del concurso de elegancia de Pebble Beach (Monterey – California, Estados Unidos), un prestigioso galardón que se concede cada año desde 1950, ha sido para un Mercedes-Benz 540 K Special Roadster. Es el décimo modelo de la marca alemana que se lleva el premio.
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El nuevo Mercedes-AMG GT es igual de deportivo pero ahora para cuatro ocupantes El Mercedes-Benz 540 K Special Roadster es uno de los coches más lujosos y exclusivos que se construyeron en los años 30. En aquel momento fue concebido para recorrer las autopistas alemanas que Hitler ordenó construir para demostrar el poderío alemán de aquel momento.
Sólo salieron 419 unidades de las líneas de producción. Todas ellas impulsadas por un motor de ocho cilindros en línea y 5.4 litros, que desarrollaba 180 CV de potencia. Su velocidad punta era de 170 km/h, una cifra considerable teniendo en cuenta la época.
Un coche para la realeza
El secreto que guarda este Mercedes-Benz 540 K Special Roadster es su primer propietario. Fue encargado en mayo de 1937 por el que entonces era el rey de Afganistán. Mohammed Zahir Shah lo recibió en septiembre del mismo año y tiempo después, en 1950, se lo regaló a su yerno, que vivía en Reino Unido.
Este ejemplar es uno de los tres supervivientes de su tipo. Su exclusividad se vio ensalzada por los extras que pidió el rey de Afganistán: obviamente eran los mejores del momento. Apenas acumula 20.000 kilómetros en su odómetro y tanto la mecánica como el color son los originales. Conserva, también, el suelo de madera con el que salió de fábrica.
Su millonaria restauración
Estuvo desaparecido varias décadas y ha tenido cinco propietarios. El yerno del rey de Afganistán se lo vendió, en 1953, a un coleccionista estadounidense. El actual dueño (Jim Patterson) pagó por él 9,9 millones de dólares (9,15 millones de euros, según el cambio actual): lo adquirió, precisamente, en la pasada edición de Pebble Beach.
En el último año, ha sometido al Mercedes-Benz 540 K Special Roadster a una restauración integral de la mano de RM Auto Restoration en cooperación con el Mercedes-Benz Classic Center, que, además, ha proporcionado una cronología de la historia del coche y ha detallado todos los elementos que han recuperado.
Hay que destacar que Jim Patterson, el propietario del Mercedes-Benz 540 K Special Roadster, es un habitual del concurso. No en vano, en 2010 y en 2015, ya se llevó el premio Best of Show con un Delage D8 S de Villars Roadster y con un Isotta Fraschini Tipo 8A Worblaufen Cabriolet, respectivamente.
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