Se acabó lo que se daba. Las motos de París, que son legión en sus calles, ya no podrán aparcar de forma gratuita. A partir del 1 de septiembre, deberán pagar tarifas de estacionamiento. El Ayuntamiento de la capital francesa las ha establecido en tres euros a la hora en el centro de la capital y en dos en los barrios periféricos. Una facturación que se aplicará por periodos de 15 minutos.
París cuenta actualmente con 42.000 plazas de aparcamiento para vehículos de dos ruedas. Y con la nueva normativa, también podrán utilizar los espacios reservados a los coches, que suman 150.000, aunque se prevé que estas se reduzcan por las próximas restricciones al tráfico rodado.
Aparcamientos subterráneos
Además, el Ayuntamiento parisino tiene previsto ofrecer facilidades para que las motos puedan también acceder a ciertos estacionamientos subterráneos municipales.
Más información
Por otro lado, para estos vehículos estará prohibido el aparcamiento sobre las aceras y en los lugares reservados para bicicletas, bajo pena de una sanción o de la retirada del vehículo por los servicios municipales. Y, al igual que en el caso de los coches, la nueva normativa se aplicará a los vehículos no residentes en el barrio, de 9:00 a 20:00 durante todos los días no festivos de lunes a sábado.
Las excepciones
El pago se podrá efectuar mediante las máquinas dispuestas al efecto en todas las zonas de aparcamiento público. Pero también a través de diversas aplicaciones para teléfono móvil, como viene siendo habitual en los vehículos de cuatro ruedas.
En el caso de los residentes, podrán adquirir un abono anual por 22,5 euros (la mitad que el de un coche) o bien pagar 45 euros para tres años, con lo que el precio diario de aparcar la moto se reduce a 0,70 euros por día.
Y la nueva ley incluirá a todos los escúteres y motos de dos o tres ruedas salvo tres excepciones: los vehículos registrados de personas con movilidad reducida, los de profesionales sanitarios o asistentes de cuidados a domicilio y los que dispongan de mecánicas eléctricas de bajas emisiones.
Protesta generalizada
Las quejas ante la nueva disposición consistorial no se ha hecho esperar por parte de los numerosos colectivos que utilizan habitualmente la moto como medio de transporte en la capital gala. En un comunicado, la Federación Francesa de Motociclismo (FFM) y las principales asociaciones de usuarios denuncian que se trata de una medida inadecuada y poco adaptada a la realidad urbana de la ciudad.
Los firmantes sostienen que los aparcamientos disponibles para las motos son insuficientes y reclaman otras 100.000 plazas para las motos. Además, manifiestan que la mayoría de los usuarios de las dos ruedas tienen economías modestas, por lo que no podrán hacer frente a este nuevo gasto. Por otra parte, exponen que el Ayuntamiento no ha propuesto una alternativa eficaz de movilidad para sus necesidades diarias.
Por último, los afectados estiman que las motos aportan un beneficio medioambiental sobre otros vehículos más grandes, ya que emiten menos CO2 y facilitan un tráfico más fluido en la urbe.
Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, Twitter o Instagram
Cuatro décadas informando sobre el mundo del motor y probando coches de todas las categorías. Después de trabajar en diversos medios especializados (Velocidad, Auto1, Solo Auto, Motor 16, Car and Driver, EcoMotor...), ahora en Prisa Media para seguir cubriendo la actualidad en plena revolución tecnológica del automóvil.