Las Apple Vision Pro acaban de aterrizar en el mercado y a pesar de su precio (3.499 dólares, 3.250 euros según el cambio actual) ya han conquistado a mucha gente. Tanto es así que no paran de llegar sorprendentes imágenes de sus usuarios, como la de un hombre que conduce su Tesla Cybertruck con ellas puestas. ¿Es legal?
La realidad virtual bloquea la visión del mundo real y transporta a la persona a un mundo ficticio. La realidad aumentada permite ver objetos generados superpuestos en el mundo real. Las Apple Vision Pro son, técnicamente, realidad mixta porque mezclan ambos conceptos: muestran información y aplicaciones sobre la vida real.
Lo cierto es que las gafas de Apple no son las primeras de este tipo que llegan al mercado. No obstante, la marca californiana busca diferenciarse del resto puliendo la experiencia del usuario: ahí es donde otros fabricantes han tropezado.
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De momento, las Apple Vision Pro están disponibles en Estados Unidos. A pesar de ello, ya se ha generado todo un debate sobre la legalidad de su uso en tareas cotidianas. Entre ellas, está incluida la conducción.
Sus características técnicas (velocidad, nitidez, baja latencia…) y su modo de realidad aumentada hacen posible que la persona interactúe con el mundo real. A pesar de ello, Apple es clara en la información de seguridad que proporciona.
El aviso de Apple
La marca especifica que las Apple Vision Pro no deben emplearse al volante: “Nunca use Apple Vision Pro mientras conduce un vehículo en movimiento, una bicicleta, maquinaria pesada o en cualquier otra situación que requiera atención a la seguridad”.
Sin embargo, son varios los vídeos virales que muestran a gente conduciendo con las Apple Vision Pro puestas. Aunque la ley intenta mantenerse al día con las nuevas tecnologías, a veces no consigue seguir el mismo ritmo.
¿Y en España?
En España, por ejemplo, el Reglamento General de Circulación y la ley de tráfico no disponen de legislación para este tipo de dispositivos. A pesar de ello, no parece que haya muchas dudas de que cualquier conductor o conductora tendrás problemas si las autoridades le interceptan circulando con las Apple Vision Pro o similar.
Hay que tener en cuenta que conducir es, entre otras cosas, una experiencia sensorial en la que participan la vista y el oído. Llevar unas gafas de realidad virtual, aumentada o mixta limitan las capacidades de la persona que está al volante y le impiden prestar plena atención a la circulación.
Queda claro, por lo tanto, que este tipo de dispositivos afectan a la seguridad vial: no sólo son un riesgo para el conducto, también para sus acompañantes y para el resto de los usuarios de la vía. Con este planteamiento, todo apunta a que emplearlas sería una infracción grave como ocurre con el uso de auriculares: un gesto que está penado con una multa de 200 euros y la resta de tres puntos en el carné de conducir.
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