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El Alfa Romeo 33 Stradale ha confirmado lo que en la marca intuían desde su presentación: el regreso de uno de los grandes mitos del automóvil no solo tenía sentido desde el punto de vista histórico, sino también comercial.
Las 33 unidades previstas para su producción están ya completamente vendidas, a un precio estimado en torno a 1,7 millones de euros, y medio centenar de interesados se ha quedado sin coche… aunque no sin marca: estos 50 clientes ya han pagado la reserva del siguiente modelo, de su sucesor, incluso sin conocer cómo será.
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Elegancia, deportividad y una tecnología muy intuitiva: así es el nuevo Alfa Romeo Tonale 2026 Con este lanzamiento, Alfa Romeo cumple al milímetro la hoja de ruta que se marcó hace unos años: recuperar el espíritu deportivo, la artesanía y las series limitadas como forma de expresión de marca dentro del Grupo Stellantis. El 33 Stradale no es un ejercicio de nostalgia, sino una declaración de intenciones sobre el futuro de Alfa Romeo.
El modelo actúa como un puente entre el pasado y el futuro, al ofrecer dos configuraciones mecánicas: una de combustión y otra 100% eléctrica. Ambas reinterpretan de forma fiel los rasgos del 33 Stradale original de 1967, un coche clave en la historia de la marca y estrechamente vinculado a su regreso a la Fórmula 1.
El diseño ha sido desarrollado por el equipo liderado por el español Alejandro Mesonero-Romanos, director de diseño de Alfa Romeo, que define el proyecto como el resultado del trabajo de un pequeño grupo de diseñadores e ingenieros del Centro Stile, con libertad creativa y una mirada puesta en el futuro de la marca. El resultado es un coupé de proporciones muy cuidadas, con un frontal musculoso dominado por el escudo clásico, faros de base elíptica, puertas de apertura tipo élitro y una zaga corta con pilotos redondos. Todo ello se traduce en un coeficiente aerodinámico Cx de 0,375.
Minimalismo interior
El interior apuesta por el minimalismo funcional, con mandos reducidos al mínimo y materiales como aluminio, fibra de carbono, cuero y Alcantara. Hay dos acabados, Tributo y Alfa Corse, y una clara inspiración aeronáutica en el salpicadero y el túnel central.
A nivel técnico, el 33 Stradale adopta soluciones propias de un coche de carreras: chasis de aluminio en H, monocasco de fibra de carbono, suspensiones de doble brazo con amortiguadores activos y frenos Brake-By-Wire con discos carbonocerámicos Brembo. El desarrollo dinámico ha contado con la participación del piloto de Fórmula 1 Valtteri Bottas.
Mecánica biturbo
El Alfa Romeo 33 Stradale está disponible con un motor V6 biturbo de 3.0 litros, con más de 620 CV, tracción trasera y cambio DCT de ocho velocidades, permite acelerar de 0 a 100 km/h en menos de tres segundos y alcanzar 333 km/h.
El éxito comercial del 33 Stradale confirma que la exclusividad, bien entendida, sigue teniendo un enorme atractivo. Y, visto el interés por su sucesor incluso antes de existir, Alfa Romeo parece haber encontrado una fórmula tan arriesgada como rentable.
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