La DGT vigilará una acción clave que muchos conductores pasan por alto

Hasta el próximo domingo, la Dirección General de Tráfico (DGT) vigilará con especial interés una infracción no muy habitual, pero sí relevante y grave: la falta de uso del cinturón de seguridad empuja muchas veces a la muerte en un siniestro vial. Y supone una multa de 200 euros y la retirada de cuatro puntos en el carné de conducir.

El fundamento de la campaña es que cualquier ocupante de un vehículo (adulto o menor, vaya delante o detrás) lleve el sistema de retención que le corresponda. Tanto el cinturón de seguridad como la sillita infantil homologada. 

Más controles de la DGT

Para comprobarlo, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil y los de las policías autonómicas y locales que se unan a la campaña aumentarán los controles en las vías, tanto principales como secundarias.

La vigilancia llegará también desde el aire, con los helicópteros y drones de la DGT y mediante los sistemas de control automatizado. El organismo que regula el tráfico cuenta con 245 cámaras específicas dedicadas a vigilar el uso del cinturón de seguridad. Se ubican tanto en carreteras convencionales como en vías de alta ocupación. 

Multa por no llevar el cinturón

Detrás de la campaña de vigilancia de la DGT, los datos de siniestralidad revelan la importancia de este elemento. Los estudios demuestran que un uso correcto reduce a la mitad el riesgo de muerte en caso de accidente. Sin embargo, el 25% de los fallecidos en siniestros viales murió sin él el año pasado.

En 2022, fallecieron en las vías interurbanas 142 personas que viajaban en turismo y furgoneta y que no llevaban puesto el cinturón de seguridad en el momento del siniestro.

En el caso de los niños, la utilización de los sistemas de retención infantil (SRI) es aún más importante. Los datos evidencian –recuerda la DGT– que nueve de cada diez lesiones graves o mortales se habrían evitado con un SRI. En caso de siniestro, las lesiones se reducen hasta en un 75% con un uso adecuado.

La ley de tráfico sanciona con cuatro puntos no llevar puesto el cinturón de seguridad, los mismos que se detraen por no utilizar el sistema de retención infantil adecuado o no hacerlo de la manera correcta. Como se trata de una infracción grave, se castiga con una multa de 200 euros.