Nunca las berlinas clásicas habían ofrecido tanto en diseño, calidad, deportividad y tecnologías por tan poco premio. Y el nuevo Mercedes Clase C es un buen ejemplo. Pero la fiebre de los SUV, que parecen más cercanos a los gustos de las nuevas generaciones, están canibalizando sus ventas y ha llevado a muchas marcas a no renovar sus modelos.
En realidad, solo los fabricantes exclusivos con mucha presencia en China y otros mercados emergentes siguen en la brecha. Y el nuevo Clase C de Mercedes, su superventas de referencia (10,5 millones desde 1990), es uno de los mejores exponentes.
Más información
Ya está disponible en España desde 45.400 euros con traje de berlina (C180, motor de gasolina de 170 CV) y a partir de 48.520 con el Estate o familiar (C200, gasolina de 204 CV). Unas tarifas superiores a las de los Audi A4 y BMW Serie 3, sus principales competidores.
Toda la gama viene de serie con cambio automático de nueve marchas y cuenta con la etiqueta ECO de Tráfico. Con motor diésel, también ECO, sube a 48.350 en berlina (C220d de 200 CV) y a 49.900 el familiar (C220d Estate). Y en otoño se ofrecerán, además, versiones híbridas enchufables, con distintivo Cero y autonomías de hasta 100 kilómetros.
Las dos carrocerías miden 4,75 metros de largo y presentan una línea baja y estilizada con detalles deportivos, como los nervios del capó delantero o la parrilla y las grandes tomas de aire del frontal.
El resultado es una berlina moderna que fusiona elegancia y deportividad, aunque con algunas soluciones que limitan la sensación de amplitud interior, como el diseño aerodinámico del parabrisas, que va muy tumbado. Pero es un coche amplio, con butacas grandes y cómodas delante, y unas plazas traseras con suficiente altura y espacio para las piernas. Y tiene un buen maletero de 475 litros (490 en el Estate y 1.510 abatiendo los respaldos).
La presentación interior es otro punto fuerte, con un ambiente elegante y sofisticado que entra por los ojos. Destaca la calidad de acabado, y ahora lleva una gran pantalla central muy fácil e intuitiva que estrena el sistema multimedia MBUX de séptima generación, el doble de rápido que el anterior.
Está tan bien aislado que apenas se oye el exterior, filtra todo sin que se note dentro y permite viajar con gran confort. Ofrece también una conducción suave, precisa y sedosa, con reacciones ágiles y seguras. Y puede incluir las tecnologías de sus hermanos mayores, como el tren trasero direccional (mejora la maniobrabilidad y la estabilidad), los faros Digital Light (capaces de proyectar iconos en la carretera para ayudar al conductor) o la iluminación interior a la carta, con hasta 64 tonos diferentes.
La gama mecánica incluye cinco opciones, todas ECO. Hay tres de gasolina, C180 de 170 CV (45.400 euros), C200 de 204 CV (46.975) y C300 de 258 CV (55.425). Y también dos de gasóleo, los C220d de 200 CV (a partir de 48.350 euros) y C300d de 265 CV (60.875).
Más adelante llegarán versiones 4Matic (4×4) y en otoño los híbridos enchufables de gasolina y diésel (313 y 304 CV), con batería de 25,4 kWh (15,9 ahora) y una autonomía eléctrica de hasta 100 kilómetros.
Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, X o Instagram