El Land Rover Discovery Sport es un modelo muy familiar, especialmente eficaz en todo tipo de terreno, con una capacidad de cinco o siete plazas y que ahora ofrece motores con tecnología microhíbrida. Con ellos logra la etiqueta ECO. Ya está disponible en versiones de gasolina y diésel con unos precios que van desde 39.440 hasta 70.250 euros.
La nueva generación del Land Rover Discovery Sport se renueva en profundidad, aunque por fuera conserve un aspecto similar. La carrocería, que puede ser de cinco o siete plazas según la versión, ha recibido algunas modificaciones para realzar el talante deportivo de este modelo. Mide 4,60 metros de largo, prácticamente igual que el anterior, y es más compacto que el Discovery, que mide 4,97 metros. Las mayores diferencias estéticas con la generación a la que sustituye se centran en los faros y pilotos de tecnología led, la parrilla, paragolpes y las aletas.
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En el interior los cambios son aún más visibles, centrándose en la pantalla del nuevo sistema de infoentretenimiento Touch Pro, asientos rediseñados en las tres filas y mejores calidades en los materiales.
Y en el aspecto práctico, se ha aumentado en 48 litros la capacidad de almacenaje para objetos en el habitáculo y un un 20 % la capacidad del depósito de combustible, que ahora es de 67 litros, alargando así la autonomía. El maletero, según la configuración de una, dos o tres filas de asientos desplegadas, es de 1.651, 754 y 157 litros, respectivamente.
Microhíbrido
Pero la novedad más importante del Land Rover Discovery Sport no se ve, ya que es su estructura, que cambia por completo. La plataforma es ahora la llamada Arquitectura Transversal Premium (PTA), que es la misma que la del nuevo Range Rover Evoque, y es un 13 % más rígida que la anterior y permite incorporar nuevas tecnologías.
En el Land Rover Discovery Sport, este elemento ha servido para electrificar toda la gama de motores, salvo el de acceso que es de motor turbodiésel 2.0, 150 CV, tracción delantera y cambio manual de seis velocidades. El resto de las mecánicas son de tecnología microhíbrida (MHEV), tracción total y cambio automático de nueve marchas.
El motor microhíbrido incorpora un dispositivo que sirve de alternador, motor de arranque y de apoyo para el motor térmico en las aceleraciones. Su principal objetivo es reducir el consumo de combustible utilizando la potencia eléctrica suministrada por una batería que se recarga durante la marcha. Gracias a este sistema de electrificación MHEV, el Land Rover Discovery Sport homologa un consumo de 6,9 l/100 km (según la normativa WLTP) y recibe la etiqueta ECO en todas sus versiones (excepto en la ya mencionada 2.0 diésel de 150 CV, que tiene la etiqueta C).
La oferta de motores, todos del tipo Ingenium de cuatro cilindros, queda configurada por tres diésel (150, 179 y 240 CV) y dos de gasolina (200 y 249 CV). Y a principios de 2020 se sumará otra versión híbrida enchufable (PHEV) con motor de gasolina de tres cilindros.
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