Cómo obtener la etiqueta ECO para un coche viejo de gasolina

Los usuarios que conviertan un vehículo de gasolina en uno impulsado por gas licuado de petróleo (GLP) recibirán hasta 200 euros de ayuda en carburante. La propuesta la firman la Asociación de Transformadores de Vehículos (ASTRAVE) y Repsol, que dispensa GLP (con el nombre comercial Autogas) en cientos de sus estaciones de servicio. 

Las ayudas, disponibles para profesionales y particulares hasta el 31 de diciembre, se podrán canjear a través de la aplicación Waylet.  

Esta propuesta se basa, dicen sus impulsores, en que la conversión a GLP es una alternativa de movilidad sostenible. Con este combustible, se reducen las emisiones de óxido de nitrógeno y las partículas contaminantes “en porcentajes muy significativos frente a los combustibles tradicionales”.

Coches que funcionan con Autogas

Mediante la instalación de un kit de GLP, viable en casi cualquier modelo de gasolina, el propietario del vehículo puede solicitar a la Dirección General de Tráfico (DGT) la etiqueta ECO, con las ventajas que esto implica. Este distintivo ambiental sirve, en la mayoría de los casos, para circular sin restricción alguna por las zonas de bajas emisiones.  

Por otra parte, la conversión a GLP supone un notable ahorro en el repostaje, ya que el gas licuado de petróleo cuesta hasta un 40% menos que los combustibles tradicionales. Este martes, con datos del Ministerio de Transición Ecológica, el precio medio de la gasolina 95 es de 1,767 euros por litro, frente a los 0,942 euros del Autogas, disponible en algo más de 800 estaciones de servicio en España.

Esta mutación del coche es un método que cada vez usan más propietarios para obtener la etiqueta ECO. En 2022, las transformaciones se incrementaron un 36,5% y alcanzaron un volumen de 3.512 unidades, según los datos de ASTRAVE. La asociación espera igualar o superar estas cifras a finales de 2023: hasta mediados de septiembre, se habían realizado cerca de 3.000 conversiones.

La modificación no exige demasiadas intervenciones en la mecánica y los talleres especializados disponen de kits adaptados para casi todos los modelos. La transformación exige instalar un depósito para el gas, normalmente en el hueco de la rueda de repuesto, y un circuito para llevar el GLP hasta el motor.

Con esta conversión, el vehículo se convierte en un híbrido bifuel y garantiza una autonomía de hasta 1.200 kilómetros por depósito. Además, si en la ruta no hay una estación de servicio con Autogas, el coche puede seguir funcionando con gasolina.  

¿Qué coches pueden pasarse a GLP?

Los vehículos susceptibles de realizar esta adaptación a GLP son principalmente los de gasolina. En los diésel, por lo general, se desaconseja, ya que resulta más complejo y costoso.  

No obstante, no todos los turismos de gasolina pueden someterse a la operación. Deben cumplir, como mínimo, la certificación de emisiones Euro 3, que corresponde a los vehículos matriculados desde 2001. 

¿Cuánto cuesta convertir el coche a GLP?

En cuanto al precio, el coste de convertir un coche de gasolina para que funcione también con GLP puede oscilar entre los 1.000 y los 2.000 euros, según el modelo y la cilindrada. Una vez hecha la transformación (siempre en un taller cualificado), habrá que pasar una revisión especial en una estación de inspección técnica de vehículos (ITV).

Este paso es imprescindible para solicitar después la etiqueta ECO a la DGT. Solo podrán obtenerla aquellos que posean las homologaciones Euro 4, Euro 5 o Euro 6, es decir, los matriculados a partir de 2006.