En particular, el debate sobre el uso de botones físicos frente a los controles táctiles para manejar sistemas clave, como el climatizador o el infoentretenimiento, ha generado opiniones diversas entre fabricantes y conductores.
Los botones físicos, un componente tradicional de los coches, están siendo reemplazados en muchos modelos nuevos por pantallas táctiles elegantes y modernas. Sin embargo, esta transición no está exenta de controversias según un estudio realizado por la plataforma digital autotrader.
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Ventajas de los botones físicos
Una de las principales ventajas de los botones físicos es su simplicidad y familiaridad. Durante décadas, los conductores han utilizado mandos giratorios y botones para ajustar la temperatura, el volumen del audio o incluso navegar entre funciones del vehículo.
La retroalimentación táctil que ofrecen es un elemento clave para muchos usuarios. Al tacto, se pueden sentir y ubicar sin desviar la atención de la carretera, lo que aumenta la seguridad.
Un estudio realizado por la revista automovilística Consumer Reports reveló que un alto porcentaje de los usuarios prefiere los controles físicos para funciones clave debido a su facilidad de uso, especialmente en condiciones de conducción. “Es mucho más intuitivo girar un mando o presionar un botón que buscar en una pantalla táctil”, comentó uno de los encuestados en la investigación.
Además, los botones físicos son más confiables en diferentes condiciones climáticas. En situaciones extremas de frío o calor, las pantallas táctiles pueden no funcionar tan bien, mientras que los botones tradicionales mantienen su funcionamiento sin problemas.
Contras de los botones físicos
No obstante, los botones físicos ocupan espacio en el tablero de mandos, lo que puede limitar el diseño interior del coche.
Muchos fabricantes apuestan por un diseño minimalista y limpio que los controles táctiles permiten. Además, los botones pueden desgastarse con el tiempo y perder su funcionalidad, lo que puede suponer un coste de reparación adicional.
Los defensores de los controles táctiles argumentan que la tecnología ha avanzado lo suficiente como para ofrecer soluciones más innovadoras que sustituyan a los controles físicos tradicionales, dando lugar a una estética más moderna y un mayor nivel de personalización en el interior del vehículo.
Ventajas de los controles táctiles
La principal ventaja de las pantallas táctiles es su flexibilidad. Pueden albergar múltiples funciones sin requerir numerosos botones o perillas, lo que permite un tablero más despejado.
A través de una pantalla central, los conductores pueden acceder a una amplia gama de ajustes y configuraciones, desde la climatización hasta las funciones avanzadas de navegación, audio o conectividad con el smartphone.
Este enfoque también facilita la actualización de software, lo que permite a los fabricantes mejorar y añadir nuevas funciones a los vehículos sin necesidad de cambios físicos.
Los estudios de J.D. Power y Autotrader destacan que las generaciones más jóvenes, que están más acostumbradas al uso de smartphones y tabletas, tienden a preferir los dispositivos táctiles.
Para ellos, deslizar y tocar una pantalla resulta más natural que usar botones. En muchos casos, estas pantallas ofrecen gráficos más detallados y animaciones que mejoran la experiencia visual.
Contras de los controles táctiles
Sin embargo, la principal desventaja de los controles táctiles es la distracción que pueden generar. Al ser superficies planas, los conductores deben desviar la vista de la carretera para interactuar con ellos, algo que no ocurre con los botones físicos que, al tener relieve, permiten ser identificados sin necesidad de mirar. Esto ha suscitado preocupaciones en cuanto a la seguridad vial.
Un informe de la National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA) en Estados Unidos alertó sobre el incremento en los tiempos de respuesta y la distracción visual asociada al uso de pantallas táctiles mientras se conduce. “En una pantalla táctil, no puedes sentir lo que estás haciendo, tienes que mirar”, explica el estudio.
Esto ha llevado a que algunos fabricantes reconsideren la eliminación total de botones físicos en ciertos modelos.
Además, algunos usuarios han expresado su frustración con las pantallas táctiles, especialmente en situaciones en las que fallan o se vuelven poco eficaces, ya sea debido a errores de software o porque no reaccionan bien a los toques cuando se usan guantes.
Estos problemas, aunque no son generalizados, pueden suponer una complicación significativa para los conductores, en especial cuando ocurre durante la conducción.
Opiniones de los usuarios
Los estudios reflejan que no existe un consenso claro entre los usuarios. Mientras que los conductores de más edad y aquellos que priorizan la seguridad tienden a preferir los botones físicos, muchos conductores más jóvenes están a favor de la adopción de pantallas táctiles.
De hecho, el mismo estudio de J.D. Power mostró que los usuarios que conducen coches con interfaces mixtas, que combinan controles físicos con pantallas táctiles, son los que reportan mayores niveles de satisfacción.
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