Un aspecto más dinámico y tecnología a la última. La actualización de la quinta generación del Renault Clio ha sido desvelada en un evento retransmitido desde París de forma simultánea a Londres, Milán, Colonia y Madrid.
En un momento en que parecía que los modelos de formato SUV lo tenían todo ganado, un coche del segmento B como el Peugeot 208 logró ser en 2022 el más vendido en Europa, incluso destronando al hasta ahora imbatible Volkswagen Golf, un compacto del segmento superior
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Renault ha sido desde siempre un gran especialista en esta popular categoría de los utilitarios. Y lo ha demostrado ampliamente en las últimas décadas con el Clio, del que se han vendido en el mundo nada menos que 16 millones de unidades y uno de ellos correspondiente al mercado español.
La primera generación del modelo se presentó en 1998 y su última evolución llega ahora para seguir siendo todo un referente en una categoría que, como demuestran las últimas cifras, está lejos de perder su importante peso en el mercado. Y es que, en el ranking de ventas, el Clio consiguió el pasado año cerrar el top ten de los coches preferidos por los europeos.
Frontal diferente
Competidor directo del exitoso 208, el Clio 2024 estará disponible para reservar desde el mes de junio y los primeros clientes lo recibirán a finales de verano. En realidad, se trata de una revisión en profundidad del modelo lanzado en 2019, que cambia radicalmente su aspecto pero no así sus dimensiones, además de incorporar importantes novedades en su gama y equipamiento.
En el apartado estético, el nuevo Clio se distingue claramente de su antecesor. Todo su frontal ha sido renovado y con ello se convierte en el modelo pionero de lo que la marca anuncia como “nueva ola” de sus vehículos en cuanto a estilo se refiere. Parrilla de mayor tamaño, cambio de formas en los paragolpes y unos faros más estilizados (de led en todas las versiones) son los rasgos diferenciadores de esta última entrega del Clio.
Y el conjunto está encuadrado por unas nuevas luces diurnas laterales que realzan la expresividad del nuevo diseño recreando el propio logotipo de Renault, aunque desdoblado en dos partes.
En el interior, los cambios son menos evidentes y hereda el salpicadero del Clio actual. Pero ahora la pantalla central puede ser de siete o 9,3 pulgadas según la versión y la mejora principal del sistema de infoentretenimiento es que ahora la conexión para replicar el móvil se puede realizar de forma inalámbrica.
Cuatro motorizaciones
Asimismo, el Clio incorpora un nuevo cuadro de instrumentos digital de serie (con pantalla de siete o 10 pulgadas según la versión), una cámara de ayuda al aparcamiento de 360º y hasta 20 ayudas electrónicas, que le otorgan el Nivel 2 en la conducción autónoma.
A partir de ahora, el Clio renuncia al cuero de origen animal en todos sus guarnecidos e incorpora nuevos tapizados orgánicos obtenidos con un 60% de materiales vegetales. Y en la versión superior, que ahora se llama Esprit Alpine en sustitución del anterior RS Line, los pedales son de aluminio, los asientos del tipo deportivo, más envolventes, y los tapizados van rematados en el color azul distintivo de la escudería de competición.
La oferta mecánica también ha recibido una importante actualización. El motor de cuatro cilindros 1.3 TCe de 140 CV desaparece del catálogo y la gama recurre al tres cilindros 1.0 TCe con potencias de 90 CV, en una versión de gasolina, y 100 CV en otra híbrida de gasolina y gas licuado de petróleo (GLP) con distintivo Eco.
Tres acabados
Además, Renault mantiene en el Clio una versión diésel dCi de 100 CV destinada a un uso intensivo por carretera y, la opción más potente de todas, la híbrida electrificada E-Tech ya conocida de la generación anterior, con 145 CV y que es la única que dispone de un cambio automático.
Esta última mecánica destaca por su reducido consumo (4,1 l/100 km), que posibilita una autonomía de hasta 900 kilómetros con un solo depósito de gasolina. Y otra ventaja es que en uso urbano puede funcionar hasta un 80% del recorrido en modo eléctrico para reducir al mínimo sus emisiones.
El nuevo Clio desvelará sus precios definitivos en junio y a partir de entonces podrá reservarse, estando previstas las primeras entregas en septiembre. La gama se ha simplificado y a partir de ahora se estructura en tres acabados: Evolution, Techno y Esprit Alpine.
Por otro lado, y al igual que su antecesor, parte de los componentes más importantes del Clio son de origen español. En concreto las cajas de cambios, fabricadas en Sevilla, y los motores que se producen en Valladolid.
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Cuatro décadas informando sobre el mundo del motor y probando coches de todas las categorías. Después de trabajar en diversos medios especializados (Velocidad, Auto1, Solo Auto, Motor 16, Car and Driver, EcoMotor...), ahora en Prisa Media para seguir cubriendo la actualidad en plena revolución tecnológica del automóvil.